El pasado jueves 22 dimitió Justin Forsyth. El director adjunto de Unicef fue acusado por tres trabajadoras de enviar mensajes inapropiados. Los sucesos tuvieron lugar mientras trabajaba para la ONG Save the Children en los años 2011 y 2015, años en los que fue consejero delegado de esa organización.
Hacete socio para acceder a este contenido
Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.
ASOCIARMECaras y Caretas Diario
En tu email todos los días
La acusación vino de parte de tres trabajadoras de la organización que denunciaron los mensajes que Forsyth les mandaba haciendo alusión a su vestimenta y a lo que sentía por ellas.
El directivo, que ya fue investigado en esos años por la propia organización, ahora hizo alusión a las disculpas que ofreció a las afectadas y reconoce haber cometido «algunos errores personales».
«Le agradecemos al Sr. Forsyth su trabajo en los dos últimos años para defender a los niños más vulnerables y ayudar a que Unicef avanzara en su misión para salvar las vidas de los niños», dijo en un comunicado Henrietta Fore, la directora ejecutiva de la organización.