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Economía

Fibra óptica: Uruguay lidera en el mundo

Según los últimos datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), la expansión de fibra óptica entre los países miembros alcanzó una tasa promedio de 13,5% hasta junio de 2020.

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Chile y México se ubicaron entre los primeros diez lugares por crecimiento de conexiones de fibra óptica al hogar con tasas de 37,6% y 34,2% año con año, respectivamente, hasta junio de 2020.

Costa Rica, por su parte, en proceso de integrarse completamente a la OCDE, reportó también una fuerte tasa de crecimiento de 62,61% año con año.

Y aunque el crecimiento de fibra óptica en Colombia también se ubica por encima del promedio de la OCDE con 17,9%, es un nivel significativamente menor al de sus pares latinoamericanos.

México reportó un crecimiento de 1,12 puntos por penetración de conexiones de banda ancha fija por cada 100 habitantes, nivel similar al de la OCDE.

Israel se colocó como el líder, ya que prácticamente duplicó el número de conexiones durante el último año, seguido por Reino Unido, con una tasa de 69,3% e Irlanda con 58,8%.

 

Tasas de crecimiento aún insuficientes

Sin embargo, las tasas de crecimiento, aunque positivas, son aún insuficientes para expandir la penetración de conexiones de banda ancha fija (mediante todas las tecnologías) entre los hogares de la región, ya que las naciones latinoamericanas se ubican todavía al final de la tabla de entre los países de la OCDE.

En cuanto a la banda ancha fija, hasta junio de 2020, Colombia exhibía la penetración más baja por penetración con 15,25 conexiones por cada 100 habitantes, seguido por México con 16,21, Costa Rica con 18,8 y Chile con 18,82 conexiones. Suiza, Francia y Dinamarca se ubican como los líderes en esta categoría con tasas de penetración de 47, 55, 44,58 y 44 y 21 conexiones, respectivamente.

Si se consideran únicamente conexiones mediante fibra óptica, Corea del Sur es el líder con 35,9 conexiones por cada 100 habitantes, seguida por Suecia (29,1) y Japón (26,6).

En el caso de la banda ancha móvil, destaca que todos los países latinoamericanos miembros de la Organización se ubicaron por debajo del promedio de crecimiento por penetración de los servicios. En promedio, la OCDE en su conjunto reportó una tasa de crecimiento de 3,3 puntos porcentuales en el número de conexiones móviles por cada 100 habitantes, Colombia se acercó con 3,13 puntos, seguida de Costa Rica con 2,94 y México con 2,71 puntos.

Aunque la tasa de crecimiento de Chile quedó lejos de sus pares al reportar solo 0,79 puntos de crecimiento, el país exhibe la tasa de penetración de banda ancha móvil más alta en América Latina con 95 conexiones por cada 100 habitantes, dificultando el crecimiento conforme se expande el servicio a las áreas más marginadas o de menores ingresos.

 

Ventaja de Uruguay

Uruguay no es miembro pleno de la OCDE. En América Latina solo hay cuatro países que integran el organismo: Costa Rica, México, Chile y Colombia.

Sin embargo, a fines de diciembre de 2020, la cobertura de fibra óptica que llegaba a un espacio habitable o de trabajo en nuestro país superaba el 80%, mientras que proyecciones recientes indican que los países europeos que liderarán el mercado en 2026 (Rusia, Alemania, Francia y Reino Unido) lo harán con porcentajes que oscilan entre 27% y 53%.

De acuerdo a las proyecciones realizadas por la empresa extranjera Idate, para 2026, Rusia, Alemania, Francia y Reino Unido serán los países que cuenten con más posibilidades de conexión con porcentajes que van desde el 27% al 53%, cifra bastante inferior a la que alcanza Uruguay en la actualidad.

Al realizar una valoración sobre el posicionamiento de nuestro país en materia de FTTH, el experto hizo referencia a la apuesta que realizó el gobierno del Frente Amplio. «Ha sido una política pública del Estado que decidió invertir en dotar a la población con la mejor tecnología en lo que refiere al acceso a internet». Para Gómez, esa decisión tiene que ver con «considerar el internet como un elemento clave no solo para el desarrollo económico, sino también para garantizar el acceso a derechos fundamentales como el de información, expresión y entretenimiento».

«Lo que marca la diferencia es que en Uruguay existió una inversión del Estado fuerte y sostenida, mientras que en esos países europeos la apuesta a la cobertura se hace a través del mercado, del interés privado y solo en función de la rentabilidad que puede tener. No se hacen apuestas estratégicas como la que se hizo en nuestro país», dijo a Caras y Caretas Gustavo Gómez, director ejecutivo en Observacom (Observatorio Latinoamericano de Regulación, Medios y Convergencia), al conocerse dicho informe.

En abril de 2020, un comunicado de Presidencia de la República informaba que Uruguay contaba con la mejor infraestructura de telecomunicaciones de América Latina, incluido su centro de datos, acceso universal a la fibra óptica por parte de empresas y la transformación de Antel en proveedor internacional gracias al cable submarino, subrayó el documento Un Uruguay para todos. Estas condiciones ubican al país en un lugar destacado también en gobernanza digital, que le permitió su ingreso al grupo D9.

El Datacenter Internacional de Antel Ing. José Luis Massera, ubicado en el Polo Tecnológico de Pando, Canelones, con más de 12.500 metros cuadrados, es el cuarto en el mundo con certificado Tier III del Uptime Institute, tanto en diseño como en construcción, lo cual ubica a nuestro país a la vanguardia en materia digital, subrayó la página 30 del documento Un Uruguay para todos.

Por otra parte, destaca que el 100% de las empresas utiliza internet por fibra óptica. Además, Uruguay es el primer país de América Latina en desarrollar internet 5G con servicio comercial, una tecnología que multiplica la velocidad de conexión por 10 veces en relación a la anterior, con aplicación en la industria, la salud, la educación y el entretenimiento. La inversión anual de la empresa pública de telecomunicaciones para el desarrollo de este avance supera los 100 millones de dólares.

Uruguay es el único país de América Latina que cuenta con conexión transoceánica. A partir de la inversión pública en el cable submarino, nuestro país se destaca en calidad de conexión, una comunicación de alta capacidad y calidad con la región y con el mundo.

En materia de gobierno digital, Uruguay preside el grupo de naciones que integran el grupo Digital Nations, junto con Corea del Sur, Estonia, Israel, Nueva Zelanda, Reino Unido, Canadá, México y Portugal. Con el ingreso de Dinamarca, el espacio pasará a denominarse D10.

El documento indica como hitos la consolidación del Plan Ceibal y Agenda Uruguay Digital, proyectos públicos enfocados en principios como la inclusión, la equidad y la ciberseguridad, entre otros. Las medidas adoptadas impulsaron al país en diversos rankings de acceso digital internacionales.

En octubre de 2020 Uruguay volvió a ser noticia en el mundo y se posicionó a la cabeza del continente en el índice elaborado por Surfshark que destacó entre las naciones de rendimiento, gracias a su decidida apuesta a la innovación y la tecnología “sorprendente”.

Este reconocimiento se sumó a su destacada performance en gobierno digital, con el que despuntó por la extendida participación ciudadana y su política de gobierno abierto, además de ser la primera nación latinoamericana en integrar el D9 (hoy “Digital Nations”), un selecto grupo que reúne a las naciones más desarrolladas en la materia.

El país ocupa el primer lugar en Latinoamérica en el Índice de Calidad de Vida Digital 2020 (DQL) que elabora Surfshark, reconocida empresa internacional abocada a la ciberseguridad. A nivel mundial se posiciona en el puesto 36 con un puntaje de 0,59/1,00 y destaca entre el grupo de los países “sorprendentes”, que superan las expectativas de bienestar digital de acuerdo a su PIB per cápita.

Uruguay se destaca por cinco pilares fundamentales de la calidad de vida digital: su acceso a internet (que remite al costo de la conexión), su calidad de internet (punto que responde a velocidad y estabilidad de conexión), su infraestructura digital (con lo que se contempla tanto nivel de desarrollo como inclusión de los ciudadanos), su gobierno digital (nivel de desarrollo de la digitalización de los servicios del Estado) y, finalmente, su seguridad digital (que evalúa lo preparado que está para el cibercrimen y su compromiso en la protección de la privacidad de los usuarios).

Por su avanzada infraestructura tecnológica y fuerte compromiso con la inclusión, Uruguay es el país latinoamericano de referencia en bienestar digital. Tiene el mayor grado de penetración de internet en banda ancha del continente y el mayor porcentaje de compañías y hogares conectados por fibra óptica.

A esto se suma su decidida apuesta a la transformación electrónica, que lo convirtió en el país más avanzado en trámites digitales de la región, de acuerdo al Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Algunas iniciativas destacadas son la Agenda Uruguay Digital 2020, que tiene como meta alcanzar el 100% de los trámites en línea para 2020, el Programa Salud.Uy y la Historia Clínica Electrónica Nacional, que se orientan a mejorar la calidad y continuidad asistencial de los ciudadanos a través de la tecnología.

 

Antel invertirá US$ 130.720.000 este año

Antel asegurará en este período la cobertura de telefonía móvil al 99% de las localidades del país con menos de 500 habitantes y prevé destinar el 86% del presupuesto de fibra óptica de 2021 a los departamentos del interior. Priorizar las inversiones en el Uruguay profundo provocará un impacto social sumamente importante, estimó el titular del ente, ingeniero Gabriel Gurméndez.

Este año la empresa pública trabajará en varias ciudades del interior, donde se culminarán las obras de tendido de fibra óptica que quedaron inconclusas, como Nueva Helvecia, Nueva Palmira, Pando, Río Branco, Piriápolis y Pan de Azúcar, entre otras. De esta forma, se buscará completar la red en aquellas localidades que superen los 5.000 habitantes. “El 86% de la inversión en fibra óptica, en 2021, será en el interior del país”, afirmó Gurméndez.

Además, indicó que la pandemia de covid-19 dejó al descubierto cierta inequidad en el acceso a la conectividad entre los uruguayos. En este sentido, el directorio priorizó al interior del país en el nuevo plan de inversiones. Es el caso de la nueva radio base instalada el 16 de marzo en Diego Lamas, departamento de Artigas, que se suma a soluciones similares en Paso del Cerro, Mendoza Chico y Paso Hospital. “Hemos sentido una fuerte demanda y un clamor por la conectividad en el interior”, manifestó.

Asimismo, señaló que la empresa identificó 53 pequeñas localidades del interior profundo, donde se planea, en el correr de este año, instalar nuevas antenas, con el objetivo de brindar mayor cobertura. A fin de instalar radio bases en predios de centros educativos, complejos habitacionales o comisarías de cada zona, Antel coordina con la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), el programa de vivienda rural Mevir y el Ministerio del Interior.

Con estas obras, estará asegurada la cobertura de telefonía móvil en el 99% de las localidades de menos de 500 habitantes. “Es de un impacto social sumamente importante para el arraigo de nuestra gente”, subrayó el jerarca. Agregó que este año se buscará alcanzar el 99% de cobertura móvil en las rutas nacionales 1, 5, 8 y 9. Mientras que, para 2022, se trabajará en la ruta 26 y con énfasis en ciertas zonas productivas que necesitan mejorar la conectividad.

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