El Atlético, a falta de más finura en su juego de ataque ha basado la firmeza de su paso en la solidez defensiva. En esta tarea merece especial mención Godín, ausente la pasada jornada.
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Los números globales del Atlético en defensa siguen siendo espléndidos, como poco; pero el momento es delicado. Recapitulando: el 27 de enero el conjunto rojiblanco había encajado 12 goles en 32 partidos, con una media de sólo 0,375 por choque; hoy, apenas dos semanas después, son 18 en 35 duelos y la media se ha elevado hasta los 0,51.
Es una brecha en el sistema del Atlético que requiere rápida sutura por parte de Godín y compañía.