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Política

Gonzalo Civila: “Puedo aportar en el proceso de abrir las ventanas»

El diputado socialista es el candidato para ocupar la Secretaría General del Partido Socialista por parte de lo que se denomina -aunque a él no le gusta la formulación- “ala ortodoxa”. Tiene 34 años. Busca terminar con “una fuerte desconexión entre la vida cotidiana de la personas y la actividad política” que existe en la actualidad.

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Por Pablo Tosquellas

El diputado Gonzalo Civila es el primer dirigente socialista en anunciar que acepta ser candidato a la Secretaría General del Partido Socialista (PS), en elecciones que se desarrollarán a fines de marzo. Representa a la denominada ala “garganista”. Civila tiene 34 años y es profesor de Filosofía. Fue secretario político departamental entre 2010 y 2016. Desde esta última fecha es responsable de la comisión de Desarrollo Partidario de la colectividad, además de integrar el comité central de la misma.

En diálogo con Caras y Caretas, Civila expresó su preocupación por “una fuerte desconexión entre la vida cotidiana de la personas y la actividad política”. El dirigente socialista manifestó que de llegar a ocupar la Secretaría General del PS renovará las herramientas para “dinamizar” la vida partidaria con la finalidad de “abrirla a la participación” y que la ciudadanía pueda “incidir en la propuesta política” del Frente Amplio (FA) de cara a las elecciones nacionales, que podrían determinar un cuarto período de gobierno de la izquierda.

Al respecto, Civila señaló que se tratará de un “momento crucial” para la vida del país en tanto existen propuestas políticas “retardarias” que buscan “la restauración” que pueden hacer detener “los avances democráticos” de su fuerza política. El diputado añadió: “Tenemos que triunfar en las elecciones, pero no nos podemos quedar en ello. Es preciso generar espacios en los que haya participación, una acción concreta de la gente. Creo que puedo aportar en el proceso de abrir ventanas, en apostar a una auténtica construcción colectiva”, añadió el postulante a la Secretaría General del PS.

Civila insistió en escuchar las demandas de los ciudadanos para “hacer una síntesis” y ser capaces de “discutir el futuro con apertura”. Dijo, asimismo, que es preciso generar “una plataforma en la que puedan confluir organizaciones sociales  y personas que trabajan en iniciativas concretas de construcción popular y solidaridad”. “Desde el partido es necesario promover una incidencia mayor de las departamentales y los centros socialistas que son quienes están más cerca del territorio; alimentarnos de esos procesos, generar discusiones, descentralizar y transferir poder”, afirmó el diputado socialista.

El dirigente manifestó que es preciso profundizar en la “mirada socialista” y “aportar a la unidad del Frente sin renunciar a la identidad” porque es necesario que la misma esté en “los énfasis” que debe tener el programa de gobierno, con un eje en “la democratización de la sociedad entendida como construcción de espacio público y socialización de factores de poder”. En ese sentido, apuntó: “En estos años hay amplios colectivos que han mejorado sus condiciones materiales de vida, pero, no obstante, siguen primando ideas individualistas y lógicas consumistas, ya que no hubo un avance en conciencia que permita sostener el cambio estructural y cultural. Debemos fortalecer la construcción del cambio desde abajo hacia arriba, y, en eso, el rol de las organizaciones políticas es fundamental”.

El dirigente marcó que se debe continuar profundizando “la descentralización” política que han impulsado los gobiernos del FA, pero no para que los municipios sean un coto para los caudillos locales, sino para incentivar una “genuina participación social”.

Consultado sobre qué autocrítica efectuaría sobre los tres períodos de la izquierda al frente del Ejecutivo nacional, Civila contestó que se debió haber profundizado en “la lucha ideológica, promoviendo otros valores”, haber alentado “una mirada más solidaria”. Este aspecto, a su entender, pasa por la acción de la fuerza política y también por políticas de gobierno como las referidas a educación, seguridad, vivienda y “distribución de la riqueza”. Sobre este aspecto, enfatizó que continúa existiendo “una importante concentración de riqueza y medios de producción”, como se evidencia en el caso de la tierra.

También puso el énfasis en la fragmentación social. Al respecto, sostuvo que “una de las dimensiones más claras es la referida a la segregación residencial y territorial”. Las desigualdades dan lugar a la existencia de “mundos de la vida” distintos que “funcionan a diferentes velocidades y que con frecuencia sólo se comunican a través de la violencia y las lógicas capitalistas del consumo”.

“Las dinámicas de fragmentación se expresan de múltiples formas en la vida cotidiana y se traducen en formas de concebir la vida y las relaciones sociales que impiden la emergencia de un proyecto emancipatorio colectivo. La solidaridad que circula en la sociedad, a través de los esfuerzos y actitudes de personas y organizaciones, es el punto en el que hay que pararse para construir alternativas”, manifestó Civila.

En otro orden, sostiene el dirigente socialista, es necesario un cambio en la matriz productiva. Sobre este punto, ahondó que ello “implica una mirada centrada en los trabajadores y en todos aquellos agentes de la transformación que permitan trascender los límites de una economía para pocos”. “En este marco, la incorporación de tecnología y conocimiento debe ser concebida e instrumentada en función de un proyecto de igualdad y emancipación humana”, añadió.

En otro orden, manifestó que se deberá promocionar la economía social, lo que “implica formas de producir y distribuir basadas en lógicas colaborativas, asociativas y solidarias, que se proponen crear alternativas a las formas capitalistas tradicionales”.

“La articulación de la economía social con iniciativas de desarrollo local y regional, y con políticas sectoriales que además atiendan los desequilibrios territoriales, es clave para promover una transformación de la sociedad orientada por valores de solidaridad y libertad. Estos procesos deben ir acompañados de una expansión de la democracia política, promoviendo una participación social diversa e incidente en la construcción del espacio público, y de una creciente desmercantilización de bienes sociales y recursos estratégicos”, explicó Civila.

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