«Sé que Estados Unidos tiene reservas de vacunas y no las va a utilizar todas. Tal vez estas dosis podrían ser donadas a Brasil o a países más pobres que no pueden pagarlas», declaró Lula a la periodista Christiane Amanpour, de la televisora CNN.
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En este caso, comentó la posibilidad de donación de 10 millones de dosis del inmunizante desarrollado por la empresa anglo sueca AstraZeneca que no pueden ser utilizados en la nación norteamericana porque no hay registro en la agencia reguladora.
Amplificada este jueves en medios periodísticos locales, portales noticiosos y redes sociales, en la entrevista el fundador del Partido de los Trabajadores manifestó que le gustaría recomendar a Biden que convoque a una reunión del G20.
«Es urgente convocar a los principales líderes mundiales y poner sobre la mesa un único tema: vacuna, vacuna, vacuna», insistió.
Aclaró que dirige la solicitud al mandatario demócrata porque no cree en el Gobierno de Jair Bolsonaro. ‘Tampoco podría pedírselo a (Donald) Trump (presidente de Estados Unidos hasta 2020), pero Biden es un nuevo respiro para la democracia’, remarcó.
En otra arista de la conversación, el exdirigente obrero, de 75 años, reconoció que «si, cuando llegue el momento de disputar las elecciones (2022), mi partido y los demás aliados entienden que puedo ser el candidato, y estoy bien de salud con la energía de hoy, no negaré la invitación», remarcó.
Sin embargo, precisó que su prioridad ahora es salvar a Brasil de la Covid-19.
El gigante sudamericano confirmó ayer ser el epicentro universal de la pandemia al registrar 90.303 contagios, nuevo récord diario, y elevar el total a 11.693.838.
La actualización del Ministerio de Salud indicó además que se contabilizaron en 24 horas dos mil 648 pérdidas de vidas por la enfermedad y la cifra general ascendió a 284.775.
La semana pasada, el juez Edson Fachin, del Supremo Tribunal Federal, anuló las condenas de Lula en los procesos relacionados con la desactivada operación Lava Jato.
Con tal decisión, el expresidente, antes limitado por la llamada Ley Ficha Limpia, recuperó sus derechos políticos y puede presentarse en la carrera por el poder en 2022.