Las medidas que tomó el gobierno para frenar el avance del coronavirus en nuestro país tuvieron gusto a poco. Algunos dirían más de lo mismo. En el ámbito político muchos esperaban otra cosa, pero se quedaron con las ganas.
En el ámbito científico también hubo sorpresa. El infectólogo Julio Medina, integrante del Grupo Asesor Científico Honorario (GACH), dijo en el programa En Perspectiva de Radiomundo que «se tomó el camino más largo».
“El precio a pagar en ese camino más largo es más internaciones, más pacientes graves, más secuelas porque no se trata solo de fallecidos, más fallecidos también, obviamente, más estrés a nivel educativo porque lo que se genera alrededor de algún caso positivo es muy intenso”, indicó.
“Y ese es el tercer escenario que tal vez pueda ser el más probable”, consideró el catedrático.
“En lo personal, como profesor de la cátedra de Enfermedades infecciosas, pienso que las medidas fueron tímidas y, si salimos bien de esta situación, a pesar de que las medidas hayan sido más tímidas de lo que esperábamos, puede ser con un costo mayor al que se podría haber evitado”, enfatizó.
A Medina le hubiera gustado una regulación del ocio nocturno. “En lo personal pensaba que se iban a tomar medidas sobre todo con el ocio nocturno. Hay mucho interacción humana en el ocio nocturno, que tiene que ver con bares, con restaurantes, etc. Toda la movida que hay en la noche. Hay mucha interacción y sobre todo la interacción muchas veces de los más jóvenes, o población relativamente más joven. Es una medida que me hubiera gustado que se hubiera tomado. De repente no cerrar todo pero sí restringir bastante los horarios. Ahora, como el gobierno no lo hizo, la ciudadanía sí puede dar un paso y ayudar en eso”, subrayó.
“O sea, ya sabemos cómo nos infectamos. Si usted está en espacio cerrado y comparte el aire con otras personas, las chances de infectarse no son las mismas que si usted se queda en su casa o si hace ejercicio al aire libre”, consideró.
“Lo que ha pasado en todo el mundo y nos puede pasar a nosotros y nos está pasando es que cuanto más casos tiene usted, hay más chance de que empiece a aparecer gente cada vez más joven con enfermedades graves que requieran internación, CTI e incluso fallecer. Estamos hablando de gente joven, de 30 años, 40 años o incluso menores”, puntualizó.