La educación superior debe ser un derecho, no un privilegio.
Por eso, abriremos residencias estudiantiles en diversas regiones del país, permitiendo que 250 jóvenes al año accedan a la universidad. Imaginemos el impacto de estas oportunidades en sus vidas y en sus comunidades. Cada graduado es un líder en potencia, un agente de cambio que puede transformar su entorno.
En el plano social, es vital aumentar un 50% el monto de la Tarjeta Uruguay Social (TUS) y del Bono Crianza para los hogares más vulnerables. Estas ayudas son un salvavidas para muchas familias que luchan por salir adelante. No podemos permitir que la pobreza limite el futuro de nuestros niños. Extendemos el subsidio por maternidad a trabajadoras independientes y titulares de MIPYME, porque cada madre merece el apoyo necesario para criar a sus hijos y contribuir a la sociedad.
La vivienda es un derecho humano.
Con el Plan Primera Vivienda, facilitaremos el acceso al crédito hipotecario a las familias, ofreciendo la posibilidad de construir un hogar. Implementaremos proyectos de vivienda colectiva para adultos mayores, asegurando que vivan con dignidad y autonomía. Además, establecer un stock de viviendas para alquileres accesibles y acelerar los procedimientos para cooperativas de vivienda son pasos necesarios para garantizar que todos tengan un lugar al que llamar hogar.
La salud mental es una prioridad que no podemos dejar de lado.
Con el Plan de Salud Mental 2025-2030, abordaremos esta emergencia nacional con la seriedad que merece. Mejorar el acceso a medicamentos y reducir costos es una obligación ética. Cada persona tiene derecho a recibir la atención que necesita sin que el costo sea una barrera. Disminuir los tiempos de espera en cirugías y consultas es un compromiso con la dignidad de cada uruguayo.
Cada una de estas propuestas refleja nuestro compromiso con un Uruguay más justo y equitativo.
La protección social no es solo un deber del Estado, sino un derecho de cada uruguayo.
Es nuestra responsabilidad como sociedad garantizar que cada niño, niña y joven en Uruguay tenga la oportunidad de alcanzar sus sueños. Juntos, podemos construir un país donde la esperanza brille en cada hogar y donde el futuro sea un horizonte lleno de posibilidades.
Es momento de actuar con decisión y responsabilidad, porque el futuro de nuestras infancias y juventudes depende de las decisiones que tomemos hoy.
Dr. Andrés Lima
Candidato a Senador
EnFa
Frente Amplio