Cuando ya no podían inaugurar y reinaugurar obras realizadas por el Frente Amplio (centros educativos, viviendas y rutas), los jerarcas comenzaron a inaugurar obras monumentales propias, tales como un gallinero, una alcantarilla, una góndola en una farmacia, un hotel al que llaman “Ciudad Universitaria” y un buque portacontenedores que ya no está. Eso sin contar la mediática entrega de 15 conos de plástico a los bomberos de Salto.
El tweet que difundió el hecho, el 3 de diciembre de 2021, decía: “En la mañana de hoy el ministro de @mtopuy (Ministro de Transporte y Obras Públicas) José Luis Falero realizó una donación de 15 conos de señalización a la Unidad 243 de Bomberos Voluntarios de Salto”.
El secretario de Estado viajó 500 kilómetros y realizó una visita oficial al destacamento para entregar los conos personalmente, lo que llevó al coordinador de la Comisión Asesora de Inversiones de la Intendencia de Montevideo, Pablo Ferreri, a señalar: “El presupuesto de vialidad bajó en decenas de millones de dólares. Pero el MTOP pública orgulloso la donación de quince (QUINCE) conos de señalización. Del ridículo no se vuelve…”.
El frenteamplista Daniel Daners, exgerente de la Secretaría Nacional del Deporte, agregó: “15 conos. Cada cono cuesta U$S 8.99 en Mercado Libre. Por favor, que sea una cuenta fake. Es cierto que el Gobierno del @Frente_Amplio cometió errores en la comunicación, pero esto es una burla”.
Lo anterior solo es comparable en el ámbito privado con la entrega de 15 toallas blancas donadas por la directiva del Centro Comercial e Industrial a la Comisión de Apoyo del Hospital de Florida. En la foto de la ceremonia estaban al frente ocho personas, sin contar los periodistas presentes. Las toallas eran blancas; de haber sido de colores todavía les estarían homenajeando en la ONU.
También en Florida se entregaron, con todas las formalidades y publicidad, 4 escaleras para los funcionarios del cementerio de Sarandí Grande. Si en algo ha sido generoso este Gobierno con las murgas es en que les ha aportado abundante material para su repertorio humorístico.
Cada paso dado por el presidente ha sido difundido a todo el país a efectos de realzar su imagen: comiendo una húngara en La Pasiva, paseando con su exesposa, dominando una pelota, surfeando, bajando a la playa sin camisa, sacándose miles y miles de selfies, visitando a una quinceañera en su fiesta, comprando verduras en un supermercado del Este… Nada de esto es malo. Solo queremos apuntar a quién está detrás de cada escena sacándole provecho político.
El resultado fue excelente y está a la vista. Lacalle Pou nos deja un país hecho pedazos en casi todos los ítems; pero se va con una alta popularidad. Un ejemplo de tal ensalzamiento fue la noticia dada el 15 de enero de 2023: “El presidente participó de la presentación de nuevos cortes de carne orgánica en el Novillo Alegre de La Barra. Estuvieron presentes autoridades nacionales y departamentales y la presidenta de @ruralynaturaluy”.
El video, publicado por Presidencia de la República, en el que se ve al presidente colocando una lamparilla en una vivienda, provocando la lógica, espontánea y sincera emoción de los beneficiarios, fue el mejor spot de apoyo a Álvaro Delgado. Una pieza genial elaborada para que votáramos al delfín, ya que el actual mandatario no puede ser reelecto sino hasta las próximas elecciones.
A propósito, en el programa Palabras Prohibidas señalamos que el resultado del balotaje fue lo mejor que le podía suceder a Luis Lacalle Pou. Su imagen (por lo menos según alguna encuestadora) sigue alta, evita el desgaste del Partido Nacional durante cinco años más y regresa en 2029 como el salvador de la patria apelando a la flaca memoria de los pueblos. Seguramente, luego de unos pocos años, la gente olvidará la mayoría de los hechos de corrupción y escándalos de este gobierno.
Volviendo al tema, desde eventos que celebran el inicio de obras mínimas hasta la apropiación de logros ajenos, este Gobierno ha perfeccionado el arte de vender espejismos con la complicidad de un aparato mediático que convierte lo trivial en espectáculo.
A fines de noviembre, Montevideo fue escenario de un acontecimiento insólito: la inauguración de una garita policial en el barrio Villa Española de Montevideo. Sí, una estructura de metal y vidrio que, aunque necesaria, no debería ameritar un despliegue protocolar. Sin embargo, allí estaban las cámaras, los flashes y las declaraciones de funcionarios que pretendían hacer de esta obra menor una epopeya de la seguridad ciudadana, con una cobertura mediática desproporcionada, dado que se trata de una estructura básica que no responde a una solución integral de seguridad.
Lo peor es que ni siquiera se trataba de una inauguración, sino de una remodelación.
A ver, una inauguración como la realizada en septiembre de este año, de un tramo de 19 kilómetros de doble vía en la ruta 8… ¿es importante? ¡Claro que sí; y los vecinos de Soca estarán muy agradecidos! Ahora, ¿vale la pena movilizar por esto a las principales figuras del país con todos sus cortesanos y vehículos? ¡No!
Menos ceremonias y más trabajo ejecutivo hubiera sido más beneficioso para el país.
¿Política de realidades o de titulares?
Estas inauguraciones no son meros episodios aislados; son una estrategia deliberada para desviar la atención de las carencias más urgentes. Mientras se celebran tales eventos, la inseguridad, el deterioro de la educación y el sistema de salud y el avance de la desigualdad social quedan relegados a un segundo plano en el discurso oficial.
En un país que alguna vez lideró en políticas sociales y progreso, el Gobierno actual parece más interesado en gestionar titulares que en resolver problemas. Las inauguraciones de cartón son el reflejo de una Administración desconectada de las necesidades reales, y es nuestra responsabilidad como ciudadanos exigir más que shows mediáticos: necesitamos soluciones concretas.
Hemos intentado, sin éxito, conocer la cifra en millones de dólares que este Gobierno saliente gastó en autobombo y untar las manos de los medios aliados; pero estamos seguros de que si la mitad se hubiera volcado a la construcción de viviendas, miles de familias estarían hoy fuera de la miseria. Prioridades multicolores.
¿Será que antes de entregar la banda presidencial veremos la inauguración de un poste de luz como si fuera una obra faraónica? En el Uruguay de Lacalle Pou, todo parece posible.
Esta administración ha sido desastrosa; pero hay un funcionario que ha hecho su tarea de manera espectacular, incluso arriesgándose a terminar en la cárcel por destruir documentación que comprometía al Gobierno.
Efectivamente, y más allá de lo que la Justicia resuelva hacer con él, el funcionario más eficaz de este Gobierno ha sido el publicista Roberto Lafluf.