Por segunda ocasión y en menos de 48 horas, Rusia ha interceptado un vuelo de aviones espías de Estados Unidos, en su territorio.
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Según informa Prensa Latina, un caza ruso SU-27 (Sukhoi) procedió a interceptar la trayectoria de dos aviones espías estadounidenses, un RC-135 y un P-8A Poseidón, en las proximidades de las costas de Crimea, en el mar Negro.
El RC-135, es una aeronave de reconocimiento construida sobre la base del Boeing C-135 Stratolifter, mientras que el P-8A es un avión militar desarrollado sobre la base del Boeing 737-800. Ambas aeronaves se dedican a la recopilación de información y suelen ser usadas para el desarrollo de actividades de inteligencia electrónica, intercepción de embarcaciones y guerra antisubmarina.
Este es el segundo incidente de estas características, que se reporta por el Centro Nacional de la Defensa ruso en 48 horas.
El pasado jueves, los equipos rusos de control aéreo y seguimiento habían detectado en una zona neutral sobre el mar Negro, dos aeronaves cuyo vuelo se dirigía en dirección a la frontera nacional rusa, razón por la que de forma inmediata se activó que un caza Su-27 procediera a interceptarlo.
La información fue confirmada en comunicado oficial por el Ministerio de Defensa, en la respuesta rusa, el SU-27 perteneciente al Distrito Militar del Sur se acercó a los aviones norteamericanos, procediendo a su identificación e intercepción.
La maniobra de respuesta de Rusia se mantuvo hasta las aeronaves norteamericanas se alejaron de los límites territoriales rusos, según informara, al regreso del caza ruso, el Centro Nacional de Dirección de la Defensa.
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