Tabaré Vázquez se fue Estados Unidos y no fue un viaje común: recibió la distinción Héroe de la Salud Pública de las Américas 2018, habló ante la Asamblea General de las Naciones Unidas y tuvo tiempo para reunirse con los presidentes y cancilleres del Mercosur para analizar la marcha de las negociaciones del bloque con otros del mundo. Casi nada para un mandatario que carece del glamour de su antecesor.
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El viaje de Vázquez comenzó el domingo tras traspasar el mando a la vicepresidenta Lucía Topolansky. Acompañado por su esposa María Auxiliadora Delgado, y de los ministros de Relaciones Exteriores, Rodolfo Nin Novoa, y de Economía, Danilo Astori. El lunes fue recibido en la sede de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), donde recibió la distinción Héroe de la Salud Pública de las Américas 2018 por su compromiso con el bienestar de las personas por encima de otros intereses. Carissa Etienne, directora de la entidad destacó su visión de país sin tabaco y su postura firme contra las empresas del sector “son un ejemplo noble e histórico a ser imitado por todos los líderes”.
Con ese premio, recordó Etienne, se procura reconocer los invaluables logros del mandatario uruguayo en torno a la salud pública y recordó que se trata del “honor más alto” que puede recibir una persona por parte de la OPS.
Los acuerdos se firman para ser cumplidos”
Según nos recuerda la web de la Presidencia, el galardón se entrega desde 2002, fecha de conmemoración del centenario de la organización multilateral, y lo ha recibido un grupo selecto de personas sobre las que se valoró que realizaron una contribución excepcional a la salud pública de América.
Posteriormente, el martes, se reunió con sus colegas del Mercosur para analizar la marcha de las negociaciones comerciales con otros bloques y países. En su calidad de presidente por tempore del Mercosur, dialogó con Michel Temer de Brasil, Mauricio Macri, de Argentina, y Mario Abdo Benítez, de Paraguay.
Horas antes, acompañado del ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori, y de los embajadores uruguayos Elbio Roselli, ante la ONU, y Carlos Gianelli, ante el gobierno de Estados Unidos, Vázquez escuchó el discurso de apertura de la asamblea a cargo del secretario general del Foro Mundial, António Guterres, y de los presidentes Donald Trump, de Estados Unidos, y Michel Temer, de Brasil. Más tarde, mantuvo un encuentro con el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Ghebreyesus.
La actividad culminante del presidente se dio el miércoles cuando hizo uso de la palabra en la segunda jornada del 73.º período de sesiones de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). “El mundo sufre de las guerras, del afán de lucro indiscriminado, de industrias que no tienen consideración por el ambiente, de la contaminación y de las consecuencias del consumismo salvaje”, dijo Vázquez. “Los acuerdos se firman para ser cumplidos”, enfatizó, al llamar a los «líderes más poderosos del mundo a respetar el Acuerdo de París sobre cambio climático».
A su juicio “la crisis que experimentamos a nivel global debe ser tratada decididamente por los líderes de cada una de las naciones aquí representadas (,,,) esa es una lucha de todos porque es por la vida”.
Tenemos que tomar medidas activas para proteger a todas las personas que habitan en nuestro mundo, especialmente los más pobres”
Vázquez sostuvo que “así como la forma en la que nos comportamos afecta directamente nuestra salud, es deber de los estados de luchar por la vida de sus habitantes; es deber de todos los que habitamos este planeta luchar por el lugar en el que vivimos”. “Tenemos que tomar medidas activas para proteger a todas las personas que habitan en nuestro mundo, especialmente los más pobres”, recalcó.
“El mundo está sufriendo, así como sufre un ser vivo, de distintos factores de riesgo que lo destruyen día tras día”, sentenció. “Sufre de las guerras, del afán de lucro indiscriminado de industrias que no tienen consideración por el medio ambiente, de la contaminación y de las consecuencias del consumismo salvaje”, complementó.
Más adelante sostuvo que el Acuerdo de París, firmado en diciembre de 2015 en el marco de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático vigente desde 1994, “es la mejor esperanza posible para la supervivencia y seguridad global, así como un compromiso fundamental para el cumplimiento de la Agenda 2030” de Objetivos de Desarrollo Sustentable.
No faltó oportunidad para que el mandatario destacará las particularidades de Uruguay y su política internacional: “Uruguay no es ni será un país perfecto, pero trabaja día tras día para avanzar sin que ninguno de sus habitantes quede atrás”. Enfatizó la “institucionalidad democrática, estabilidad social y económica, principios nítidamente definidos y progresos tangibles en todos los órdenes del Uruguay”.
Destacó que el informe sobre desarrollo inclusivo publicado en enero de 2018 por el Foro Económico Mundial ubicó a Uruguay como uno de los diez países emergentes más incluyentes del mundo y segundo en América Latina, “al registrar políticas públicas eficientes que permiten traducir el crecimiento económico en reducción de las desigualdades, fomento de la inclusión social y equidad intergeneracional”.
La agenda no terminó ahí sino que el jueves, Vázquez abrió la tercera reunión de la Comisión Independiente de Alto Nivel de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre Enfermedades No Transmisibles (ENT).