El último año el precio de los alimentos en Argentina escaló por encima del 50%. Ante esta situación, diversas organizaciones sociales realizaron una movilización con el objetivo de luchar contra el hambre y contra la política económica del gobierno de Mauricio Macri. Como parte de la iniciativa ofrecieron polenta en el Obelisco y en distintos puntos de la Ciudad de Buenos Aires. «Polenta es el alimento al que nos reducen a consumir en un contexto de inflación, ajuste y despidos», manifestó Marianela «Pini» Navarro, del Frente de Organizaciones en Lucha (FOL).
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El «Polentazo Nacional», que se llevó a cabo en el centro porteño y en 17 provincias, comenzó después de las 11 y contó con la adhesión de más de cinco cuadras de militantes sobre la Avenida 9 de Julio. En este escenario se destacó una bandera de grandes dimensiones con la inscripción «El hambre no es una elección». La marcha fue impulsada por el FOL y el Frente Popular Darío Santillán y contó con la participación de agrupaciones de izquierda, «Día a día aumenta la inflación, se reduce el salario y cierran fábricas, dejando a miles de familias sin un plato de comida», denunciaron.
«Este modelo económico de hambre y exclusión hace que cada día más familias queden en la calle y se acerquen a los comedores populares», relataba un comunicado en el que se reclamaba la implementación urgente de la Ley de Emergencia Alimentaria.
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