Decenas de migrantes hondureños rompieron el cerco que se mantenía dispuesto en la frontera entre Guatemala y México. Fue tras recorrer más de 400 kilómetros para llegar a la frontera. Todavía les falta mucho más para llegar a su destino, la frontera con Estados Unidos.
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Según la web Nodal alrededor de 3.000 migrantes rompieron una valla policial frente al portón que antecede la frontera entre Guatemala y México. Ocurrió en medio de un fuerte operativo de seguridad y la expectativa sobre la reacción que tendrán las autoridades frente al grupo que ha desatado el enojo del presidente estadounidense.
Un grupo de migrantes hondureños colocó por delante a niños y mujeres para tratar de empujar la reja que dividía la frontera y lograr acceder a territorio mexicano, agrega. Ese grupo logró entrar en territorio mexicano y ser atendidos por el Instituto Nacional de Inmigraciones tras derribar la valla del lado guatemalteco y cruzar el puente sobre el río Suchiate. Sin embargo, el grueso de la caravana permanece aún en el viaducto fronterizo que conecta el municipio guatemalteco con Ciudad Hidalgo (Chiapas), agrega el diario El País, de Madrid.