La interna nacionalista volvió a primer plano de la mano de los reclamos de los denominados “autoconvocados” que reclaman bajar los gastos del estado, entre ellos suprimir los cargos de confianza. Este nuevo capítulo enfrenta al intendente de Cerro largo, Sergio Botana, con su antecesor Pedro Saravia, blanco también.
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En las últimas horas se supo que la Intendencia de Cerro Largo es la que más cargos de confianza tiene y ello es justificado por Botana por el reintegro de 202 personas destituidas por Saravia. Este estuvo al frente de la comuna entre febrero y julio de 2015, mientras Botana hacía campaña para su reelección.
«De los 410 municipales que el doctor Saravia corrió a lo perro, con el aval del Frente Amplio, yo reintegré a 202», afirmó el intendente en declaraciones a El Observador. Indicó que figuran como cargos de confianza porque fueron reincorporados sin concurso. «No los iba a poner a hacer concurso. Vine a asumir la responsabilidad política de ponerlos de vuelta y chau», señaló.
Admitió que el mecanismo de contratación de todas esas personas fue «fuera de la norma» pero dijo que se trató de «un acto de justicia» con gente que fue «víctima de una feroz persecución política».
Por su parte, Saravia dijo a Montevideo Portal que en su momento hizo «lo que correspondía hacer por ley» porque se trataba de trabajadores que ya habían ingresado «en situación irregular».
Saravia dijo que su decisión tuvo el aval del Tribunal de Cuentas y recordó que antes de proceder a la expulsión de los trabajadores consultó al Partido Nacional sobre el asunto.
«Botana tendrá que explicar las cosas que hace y no echarme la culpa a mí tres años después», sentenció.
Botana indicó que cuando hace “alguna cosa fuera de la norma como en este caso doy la cara».