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En Chile se encuentra el hombre más viejo del mundo

Se llama Celino Villanueva Jaramillo pero en Chile lo conocen como «don Celino»,tiene 121 años, cuatro más que el hombre reconocido como el más longevo del mundo por el libro Guinness.

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«Don Celino» mide poco más de un metro veinte de altura y es el hombre más viejo del planeta según el gobierno chileno, que aseguró que nació el 25 de julio de 1896. Hace 121 años. Jaramillo atravesó tres siglos y es cuatro años mayor que el japonés Nabi Tajima, el hombre reconocido como el «más longevo del mundo» por el libro Guinness de los récords. El problema de Jaramillo es que perdió su certificado de nacimiento junto a todas sus pertenencias cuando su casa se incendió hace más de 20 años. No obstante, los registros oficiales confirmaron lo que decía el anciano. «Al revisar nuestros registros, Celino Villanueva Jaramillo nació efectivamente el 25 de julio de 1896, y todavía está vivo», dijo al diario británico The Guardian Jacqueline Salinas, del departamento de demografía de la oficina de estadísticas de Chile. En 2011, el entonces presidente Sebastián Piñera y su Ministro de Desarrollo Social Joaquín Lavin, incluso festejaron con él sus 115 años y le entregaron un certificado, audífonos, dos bastones y un calefactor a leña. «Lamentablemente, no hubo ofrecimiento de un especialista geriátrico al ser el humano más viejo del mundo. En Chile, esa atención está reservada a pacientes del sistema privado y Villanueva, que es pobre, tiene que ir al sistema público, que es de inferior calidad», apuntó el Guardian.   La historia de Don Celino Villanueva Jaramillo nació en la ciudad de Río Bueno, en la Región de los Ríos, y durante la mayor parte de su vida trabajó en el campo para un terrateniente llamado Ambrosio Toledo. Cuando cumplió 80 años, lo reemplazaron por un empleado más joven y el anciano tuvo que dejar la casa que ocupaba. Gracias a una pequeña pensión, se pudo alquilar una cabaña en la ciudad costera de Mehuín pero un incendio lo dejó en la calle y sin nada poco antes de que cumpliera cien años. Marta Ramírez, una mujer de 63 años, se apiadó de él y lo recibió en su casa «pensando que no iba a vivir mucho más». Pero ya pasaron 22 años y su huésped sigue allí, aunque ya apenas ve ni escucha. «Está casi un 90% ciego debido a sus cataratas, 85% sordo y no tiene dientes hace mucho tiempo, por lo que es muy difícil entender lo que dice», indicó The Guardian . Además un neumonía que sufrió a principios de año lo debilitó mucho. Según Marta Ramírez, don Celino «no es el mismo» desde que fue al hospital.   Fuente: tn.com.ar

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