¿Cuánto más bajo pueden caer?

La campaña sucia arrancó con todo, encabezada por un canal capitalino que colocó como primicia el motivo de la separación del salteño Andrés Lima de su esposa.

Nosotros nunca nos pusimos a especular sobre por qué el presidente Luis Lacalle Pou se separó de Lorena Ponce de León. No nos interesa en lo más mínimo de quién fue la culpa, si es que alguien la tuvo. En todo caso, mencionamos la separación por sus implicancias institucionales, más allá de que en Uruguay no existe el cargo de primera dama. Incluso, cuando en una entrevista que me hizo José María Caraballo en TV Ciudad el tema fue ineludible, elogié a la pareja por la discreción con que sobrellevaron la situación. “¿Te imaginás lo que hubiera sido si esto hubiera ocurrido en Argentina?”, le planteé al periodista.

Lo único que nos interesó entonces fue la utilización de medios humanos y materiales del Estado para averiguar a dónde viajaba su exesposa. Por lo demás, le deseé lo mejor a ambos, ya fuera juntos como separados; porque las diferencias políticas tienen que estar por fuera de las personales.

Cuando el periodismo se mete con las familias de las personas públicas es porque ha comenzado a reptar como un ofidio. Por ese motivo, nunca nos pusimos a husmear con quién y por qué el exministro Jorge Larrañaga se encontraba al momento de fallecer.

De Lima a Lema

Por otra parte, la salida de Martín Lema del Mides no fue precisamente por la puerta grande; más bien fue motivo de alivio y motivó un paro y movilización de los empleados de dicho ministerio para denunciar el fracaso del ministro saliente. La Unión de Trabajadores del Ministerio de Desarrollo Social (Utmides), el sindicato de trabajadores tercerizados del Mides (Sutiga) y la Coordinadora de Ollas Populares, hicieron un paro parcial con concentración frente a las oficinas centrales de la cartera para cuestionar las políticas sobre personas en situación de calle, el programa de alimentación, el desmantelamiento del Sistema de Cuidados y el retiro del territorio.

Cuando Lema aceptó el cargo, quiso utilizarlo como trampolín para una candidatura presidencial; pero su fracaso fue estrepitoso y los funcionarios se alegraron de su salida. En primer lugar, siempre actuó de espaldas a ellos, sin considerar el valioso aporte que le podían dar desde su experiencia. Envuelto en su soberbia, jamás se sentó a dialogar con Utmides para negociar y todo concluyó con una rebaja salarial del 30 % a 370 trabajadores del Mides.

Y, por si fuera poco, Lema dejó como legado la criminalización de las ollas populares.

“Martín, tu lema es la desigualdad” decía uno de los afiches. “Te recordaremos por criminalizar las ollas populares”, “Te recordaremos por el récord de personas en situación de calle”, “Te recordaremos por la rebaja salarial”, decían otros.

Sin embargo, el principal responsable no es Lema, sino Luis Lacalle Pou.

Del Goyo a Manini

Desesperado por las encuestas, que le auguran a Cabildo Abierto solo un 2 % de los votos para la elección nacional, el general/senador y líder del partido militarista optó por resucitar al cuco del comunismo para asustar viejas y reclutas con el cerebro debidamente lavado y retorcido.

Guido Manini Ríos, el defensor más visible de los represores y violadores de derechos humanos, le ha dicho a las Fuerzas Armadas que el Pit-Cnt es el gran enemigo que deben controlar, acusándole de ser antidemocrático. “¿Quién los va a parar de que hagan lo que quieran y que entren a la Casa de Gobierno y que quieran imponer esto y lo otro? ¿Por qué no lo hacen? Porque siempre está la posibilidad de accionar a las Fuerzas Armadas”.

No es grave. Es gravísimo. Traduciendo al criollo sus palabras: si mañana el Frente Amplio decidiera llevar a Óscar Andrade o a Fernando Pereira a la presidencia de la República, los exsubalternos del líder del partido militarista deberían derrocarlos.

No le den más vueltas. Es así de simple.

Sus palabras ameritan juicio político y destitución por incapacidad moral; pero los cálculos timoratos de unos y la complicidad de otros lo hacen imposible.

De Penadés a Lafluf

Cuando el exsenador blanco Gustavo Penadés fue denunciado por abuso sexual de menores, el presidente Luis Lacalle Pou y el exministro Luis Alberto Heber lo defendieron pública y fervorosamente, dejando claro que las denuncias eran calumnias y las víctimas mentirosas. De aquella defensa infame y bochornosa, el presidente continuó con la de Roberto Lafluf.

El publicista, creador del Luis Sin Apellido, confesó en una charla telefónica con la exvicecanciller Carolina Ache que había destruido un acta protocolizada por escribano donde figuraban chats que comprometían al Gobierno, tratando de obstruir con ello la investigación del Parlamento y la Justicia.

Increíblemente, Lacalle Pou ha dicho que “Lafluf se está comiendo un garrón gigante” y “actuó de acuerdo a la ley”.

Lo pinte como lo pinte, lo que hizo su asesor se llama delito. Aun así, puede que sea cierto y se esté comiendo un garrón. Si el presidente estaba detrás de todo, si estaba al tanto de todo y no solo “pasó a saludar” cuando se tramaba el modo de engañar a la Justicia ocultando la verdad, entonces sí, Lafluf se está comiendo el garrón y quien debería estar declarando en un juzgado es su jefe, el verdadero responsable, por encima de Bustillo, Heber y cualquier otro jerarca.

De Bergara, Carrera y Layera a Preve

Luego de los espionajes o intentos y propuestas de espionaje a los senadores Mario Bergara y Charles Carrera, al exdirector nacional de Policía Mario Layera y a chiquilines de un liceo, ahora nos encontramos con que el periodista Eduardo Preve ha estado siendo el objetivo de una pesquisa totalmente ilegal.

Según lo denunciado, la Policía estaría realizando una pesquisa secreta, sin orden de la Fiscalía, debido a sus denuncias contra efectivos del Ministerio del Interior. La Dirección de Investigaciones buscaba descubrir las fuentes del periodista, el cual también informó que el ministro Nicolás Martinelli estaba en conocimiento de esto desde el 9 de noviembre de 2023.

En octubre, Preve había informado que dos oficiales de la Dirección Nacional de Información e Inteligencia de la Policía ingresaron irregularmente al sistema de interceptación de comunicaciones El Guardián y copiaron escuchas de la investigación de la Fiscalía sobre el asesinato de Cecilia Fontana de Heber, madre del exministro del Interior y hoy senador Luis Alberto Heber.

A partir de ahí, la Policía comenzó a seguir la cuenta del periodista en la red X. El reporte 566/2023, de carácter reservado, de la Dirección de Investigaciones, informa del análisis de la cuenta del periodista “donde se observa un documento interno de la DGIIP (Dirección Nacional de Información e Inteligencia) con información reservada”.

En la investigación policial figura la dirección donde viven los hijos del periodista y una fotografía junto a su padre. ¿Por qué y para qué investigar a su familia?

De Penadés a Grille

El exdirector del Comcar, Carlos Tarocco, fue condenado a tres años de cárcel por su participación en el plan del exsenador blanco GustavoPenadés. Se le imputaron los delitos de cohecho calificado agravado, asociación para delinquir y revelación de secreto. El equipo que lideró Tarocco realizó varias pesquisas contra las víctimas de Penadés. Otros dos policías ya habían sido condenados por esa causa. El grupo accedió al sistema informático del Ministerio del Interior y a un software para generar un flujograma que sustentara la teoría de que era Penadés la víctima de un plan macabro.

También resultó implicado Diego Cuiñas, funcionario del Parlamento uruguayo y director de la Secretaría Parlamentaria del Parlasur, quien ofició de nexo entre Tarocco y Penadés. Cuiñas y Tarocco estaban vinculados por pertenecer ambos a la masonería.

Paralelamente, dos funcionarias y un funcionario de la Corte Electoral también colaboraron accediendo al registro del organismo. Graciela del Vecchio era la secretaria del ministro de la Corte Arturo Silvera, del Partido Nacional. Horacio Tejera ingresó a la Corte Electoral en septiembre de 2023 presentado por el Partido Nacional. María Ximena Portillo, militante de Lista 71 y exsecretaria de Penadés que apareció en las escuchas telefónicas que investigó la Fiscalía, la Corte informó que aunque es funcionaria desde 2011, está en pase en comisión desde julio de 2020 en la secretaría del vicepresidente de Ancap, Diego Durand.

O sea, todos blancos tramando, complotando, ocultando, espiando o retorciendo.

Hace unos meses, los medios de derecha armaron un escándalo porque el presidente del Frente Amplio dijo que no podía asegurar que no tenía su celular pinchado. Considerando que Alejandro Astesiano, hombre de extrema confianza del presidente de la República en ese momento, había utilizado la tecnología del Ministerio del Interior para espiar al presidente del Pit-Cnt Marcelo Abdala, ¿no le sobraban motivos al presidente del Frente Amplio para decir lo que dijo?

En enero, el canal de Caras y Caretas TV en la plataforma de YouTube y su dominio de Gmail, cara[email protected], fueron suprimidos por causa de un hackeo, lo cual quedó demostrado. Desde el canal se emitían programas como Legítima Defensa, que varias veces superó el rating de los medios hegemónicos de desinformación.

Los contactos internacionales de Alberto Grille le permitieron recuperar lo perdido; pero el canal 8 de Rivera no tuvo la misma suerte y perdió la cuenta de Facebook con 44.000 seguidores.

La cosa viene fea, muy fea.

¿Cuánto más bajo podemos caer?