Uruguay se destaca como productor de alimentos de calidad para el mundo y dispone de rubros que son claves en la canasta alimentaria, entre ellos se destaca la leche. Si bien ha sido un sector muy afectado por la reciente sequia, fenómeno que impactó sector agropecuario, la producción de leche, las características de la cadena y las mejoras en calidad y en productividad son aspectos más que destacables en los últimos tiempos.
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No solo en Uruguay tenemos una noción relevante de la importancia de la lechería, sino que la misma es reconocida en el mundo tanto a nivel de mercados sino en diversos análisis a nivel de organismos.
Por ejemplo, según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, “aproximadamente 6.000 millones de personas consumen productos lácteos. Para que cada uno de estos consumidores reciba en tiempo y forma su yogurt, leche, queso o manteca, 50 millones de hogares en todo el mundo se dedican a la producción de leche”. En un articulo publicado en el año 2020 por el Banco Mundial se destacaba que, en América Latina, Uruguay destaca como el exportador de productos lácteos por excelencia. Al respecto algunos elementos que mencionaba eran que “más de 20.000 personas se dedican al trabajo en los tambos y las industrias lácteas”. Siendo Uruguay un país de algo más de tres millones de habitantes, es el séptimo exportador mundial de leche, reconocida por su calidad y llegando a más de 60 mercados.
Cadena integrada
La producción de leche alcanza el 5% del territorio uruguayo y con esto, de acuerdo con las estimaciones que presenta el Instituto Nacional de la Leche, se llega a alimentar anualmente a más de 20 millones de personas.
Uruguay exporta el 72% de la producción, siendo que el restante 28% (según datos de OPYPA para 2022) queda para consumo interno y de esta forma llega a ser el séptimo exportador mundial de leche. Así la leche es el producto que alcanza mayor ingreso de exportaciones agropecuarias por hectárea.
Para el 2022 las fuentes oficiales estimaron que el precio promedio 18% mayor al mismo período de 2021, como resultado principalmente de la mejora en los precios de exportación de (20%) que no fue uniforme a lo largo de todo el año. Los precios del mercado interno se vieron al alza en una estimación de 16% medidos siempre en dólares corrientes, lo que ha venido de la mano de la evolución del dólar.
Se produce en el entorno de 2.200 millones de litros anualmente, en concreto en el 2021 de acuerdo con las publicaciones del INALE se alcanzaron 2119 millones, aun no se publicaron los datos cerrados al 2022. De esta producción aproximadamente el 90% de la producción de leche es procesada por la industria nacional.
El sector abarca unos 3.146 productores para el 2022 de diversa escala, siendo un rubro con una importante componente de producción familiar, con alto alcance a nivel país. La producción de estas unidades se envía a la industria en un 73% y el 23% queda para producción de queso artesanal. A nivel de mano de obra cabe destacar que se estima unas 20.000 personas con muy bajo nivel de trabajo zafral vinculadas siendo que predominan las unidades familiares en el trabajo de los tambos.
La cantidad de productores viene en una tendencia a la baja tanto los que remiten a plantas industriales. Las existencias totales de vacunos lecheros también vienen en caída de hecho a nivel oficial en base a estimaciones de OPYPA se estima una baja de, para ubicarse en 977.630 animales. De estos, hay 389.872 vacas masa (-7% respecto a 2020-21) y 227.256 (40% más) en categorías de reposición, lo que totaliza 617.128 hembras (un incremento de 6%).
Esta tendencia al decrecimiento del stock lechero se viene observando hace varios años lo que se explica por múltiples factores y que también afecta en forma diferencial a las diferentes escalas de productores. Pero se destaca el aumento de la productividad. En concreto el año 2022 tuvo con una remisión de leche a plantas industrializadoras inferior de 1% menos a la del año precio. Esta retracción es producto se da con un aumento de productividad individual que no llegó a compensar la caída del nivel de ordeñe.
La producción tiene factores que la afectan, pero importante ha sido la mejora en calidad y en la productividad que ha tenido el sector lácteo en forma tendencial a pesar de los temas coyunturales que puedan surgir a partir de la sequía reciente. El sector lechero con estas características que hemos mencionado tiene la ventaja de poder distribuir su producción entre el mercado interno y el externo, si bien la relación es 30- 70 lo que lo hace sensible a la realidad de mercado. El clima, la inflación, el tipo de cambio y la realidad de los mercados son temas que lo afectan y en forma diferencial entre la diversidad de empresas que lo componen.
Algunos aspectos que ha tenido de relevancia son calidad, certificaciones, el uso de semilla certificada, la menora genética animal y de pasturas, la inocuidad todos aspectos fundamentales para el acceso a mercados. Entre estos aspectos que mencionamos de calidad a mencionar a nivel productivo la trazabilidad animal del 100 %, la alimentación pastoril a cielo abierto y la existencia de una genética reconocido han sido elementos claves.
Cabe destacar que seguir profundizando la inserción internacional y el acceso a mercado es fundamental por las dificultades y características de los mercados internacionales de la leche.
Uruguay históricamente tuvo una importante organización e institucionalidad en torno al sector lechero con participación de los diversos actores. La necesidad de seguir apostando al rubro y a la producción familiar siendo este intensivo en mano de obra es fundamental en tanto producción de alimentos de calidad, la relevancia del mercado interno en tanto producción de alimentos y como sector fundamental en a nivel agropecuario.