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Familiares: «Está resurgiendo la idea de que hay que cerrar el pasado»

Nilo Patiño advirtió que “hay un estancamiento en la búsqueda de los desaparecidos” y que “falta voluntad en el sistema político”.

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Caras y Caretas Diario

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Ha pasado bastante tiempo desde la última vez que se habló sobre la búsqueda de detenidos desaparecidos. Desde la organización de Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos observan con preocupación la situación. El integrante de Familiares Nilo Patiño advirtió, en diálogo con Caras y Caretas, que “está resurgiendo la idea de que hay que cerrar el pasado” y denunció que en el sistema político “falta voluntad para ayudar a la búsqueda”.

“Ahora empieza a resurgir aquella idea de que hay que cerrar el pasado […] Que no haya hallazgos es una mala noticia para nosotros, porque empiezan a pasar cosas como la que sucedió el otro día en el Parlamento cuando [el expresidente Luis Alberto] Lacalle Herrera dijo que hay que cerrar etapas, y el actual presidente del Partido Nacional, Pablo Iturralde, dijo lo mismo”, dijo Patiño a esta revista.

“Para nosotros sería lo ideal siempre y cuando aparezcan los restos y las circunstancias de las desapariciones. En una palabra, que aparezca la verdad. Por lo menos que haya un relato fundamentado y creíble para cada caso, y se encuentren documentos que no aparecen”, agregó.

El 16 de agosto de 2020, en una entrevista con El País, Iturralde dijo que a su entender Uruguay se merece una “reconciliación real” para comenzar a superar las heridas generadas previas al golpe de Estado y durante la dictadura militar. Sostuvo que los protagonistas de ambos lados deberían pedir “disculpas reales” de forma pública, como gesto para esa reconciliación.

Asimismo, Lacalle Herrera señaló el 26 de agosto: «No podemos vivir alimentados por un pasado de 40 años. Hay que poner término a todo lo que sea escarbar en el pasado para que podamos liberarnos de esos recuerdos ya gastados. Y ese sería -ya cumplidos los 80 años, de los cuales 60 [fueron] en estas actividades- mi mayor deseo en este día de conmemoración», informó El País.

Por su parte, Patiño advirtió que se está ante un estancamiento en la búsqueda de los desaparecidos. “La gente de las Fuerzas Armadas no ha aportado ningún dato importante como para terminar de encontrar los restos ni conocer las circunstancias de sus desapariciones”, indicó.

A pesar de estas situaciones, consideró que hay miles de personas que “defienden esta causa y no somos solamente las organizaciones que estamos implicadas como Familiares, esa es nuestra mayor garantía”.

“Esta causa existe porque la gente la ha sostenido, no hay nadie aparte de la gente y las organizaciones sociales que se hayan encargado de hacerlo. Para nosotros ese es el único sostén y garantía de que la búsqueda va a continuar”, afirmó.

 

¿Cómo definiría la situación de la búsqueda de detenidos desaparecidos?

Estamos ante un estancamiento en la búsqueda de los desaparecidos. La gente de las Fuerzas Armadas no ha aportado ningún dato importante como para terminar de encontrar los restos ni conocer las circunstancias de sus desapariciones.

En el caso de Argentina es lo mismo, porque los casos de desaparecidos en ese país tuvieron como protagonistas a las fuerzas de represión uruguayas.

Estamos en la misma situación que antes. Hubo un cambio desde el punto de vista de la ley, porque antes la búsqueda estaba dirigida por el Grupo de Trabajo creado en el segundo gobierno de Tabaré Vázquez, y ahora por ley está en manos de la Institución de Derechos Humanos.

Que no haya hallazgos es una mala noticia para nosotros, porque empiezan a pasar cosas, como la que sucedió el otro día en el Parlamento cuando Lacalle Herrera dijo que hay que cerrar etapas, y luego el actual presidente del Partido Nacional, Pablo Iturralde dijo lo mismo.

Incluso cuando le preguntaron a Mujica sobre lo que había dicho Lacalle Herrera, dijo que sería lo ideal. Para nosotros sería lo ideal siempre y cuando aparezcan los restos y las circunstancias de las desapariciones. En una palabra, que aparezca la verdad.

Por lo menos que haya un relato fundamentado y creíble para cada caso, y se encuentren documentos que no aparecen.

 

¿Qué importancia tenía para ustedes cambiar el organismo que dirige la búsqueda?

No es que al cambiar el organismo que dirige la búsqueda sea una modificación fundamental para nosotros. El único sentido que tenía era darle continuidad a la búsqueda y sobre todo cambiar el paradigma, pero eso se evaluará al final del periodo cuando termine la gestión de la Institución.

Cambiar el paradigma quiere decir que como el Estado no brinda información, hay que irla a buscar. Es decir crear un grupo de investigación en el que se busque criminológicamente, con los datos que hay, tratando de ubicar los patrones, para saber dónde podrían estar ubicados los restos. Es decir, poco a poco ir restableciendo las circunstancias en que desaparecieron.

Si hay algún hallazgo en este periodo al gobierno le va a servir, el problema es que para eso hace falta información y eso está en poder de las Fuerzas Armadas. Hay que ver si se la quieren dar al gobierno, hasta ahora no ha sucedido.

 

¿Hay sensibilidad del gobierno hacia la búsqueda de los desaparecidos?

Creo que globalmente sí. No se puede englobar al cien por ciento. Hay sensibilidad, cuando se habla de los desaparecidos y de las violaciones a los derechos humanos en tiempo de la dictadura, las torturas y asesinatos.No se trata de eso. Pero hay poco interés por el costo que puede tener encontrar y buscar los restos.

Para realmente encontrar la información hay que apretar a los mandos, esa no es una cuestión fácil, y hasta ahora ningún gobierno ha podido hacerlo. Nosotros creemos que lo pueden hacer, y que se tendría que haber hecho desde un primer momento.

Por eso nosotros decimos que falta voluntad y decisión.

Al principio se amparaban en aquello de que si morían los perpetradores, se iban a llevar la información y nunca íbamos a saber nada. Ya se sabe que no van a decir nada, porque si no lo hicieron en 35 años, no lo van a hacer ahora. ¿Por qué razón lo dirían ahora?

El sistema político tampoco ha ayudado, porque todas las prebendas que tienen los militares aún siendo detenidos y procesados, están amparadas y apoyadas por las Fuerzas Armadas. Tienen asistencia, tienen su sueldo pago y todos sus beneficios, por lo tanto, si llegan a hablar los van a castigar, como castigaron a Enrique Rivero en la Fuerza Aérea.

Cuando empezó a nombrar oficiales que estaban implicados en la muerte de Ubagésner Chaves Sosa, e insistió en eso, para librarse de la acusación que recaía sobre él, lo castigaron.

Familiares de él podían ir a visitarlo cuando quisieran y la Fuerza Aérea les ponía un auto, y tenían un surtido extra. Cuando empezó a hablar, todo eso se lo sacaron, y de eso no hace mucho.

Todo eso va en contrasentido de la búsqueda de los desaparecidos. Si permiten que hagan eso, es imposible que los militares que estuvieron implicados en todas las violaciones, puedan hablar. ¿Por qué lo harían? ¿Cuál será el costo? Tendrían que pagar un costo personal.

Tendría que ser al revés, pero en eso falta voluntad y decisión. La realidad es que el sistema político no ha tomado cartas en reformar las Fuerzas Armadas. Solo basta con decir que recién en 2019 se tocó la Ley Orgánica de 1974, aprobada en plena dictadura, eso solo ya es simbólicamente terrible.

No estamos hablando de dos o tres años, sino de mucho tiempo que permaneció la Ley Orgánica Militar de la dictadura y nadie dijo nada hasta 2019. Lo mismo pasó con la Caja Militar. Todo eso repercute directamente sobre la búsqueda de los detenidos desaparecidos.

En definitiva, los perpetradores estuvieron siempre dentro de las Fuerzas Armadas y las desapariciones fueron institucionales, ese es un problema gordo, porque los militares cuidan muchísimo la institución, y esa misma institución que dio el golpe de Estado es la que tenemos ahora, lo cual no quiere decir que ahora haya peligro de un golpe, no hay que leerlo así. Pero realmente si uno ve las modificaciones que hubo a lo largo del tiempo dentro de las Fuerzas Armadas, no está acompasado con la evolución del periodo democrático.

Ahora empieza a resurgir aquella idea de que hay que cerrar el pasado, y hoy se van a topar con una situación que no era la de ayer, y es que hay miles de personas que defienden esta causa y no somos solamente las organizaciones que estamos implicadas como Familiares, esa es nuestra mayor garantía. Esta causa existe porque la gente la ha sostenido, no hay nadie aparte de la gente y las organizaciones sociales que se hayan encargado de hacerlo. Para nosotros ese es el único sostén y garantía de que la búsqueda va a continuar.

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