Por: Yanina Vidal
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«La Otra Crítica» es un espacio de formación para aquellos espectadores que no los satisface la pasividad y mucho menos la mera opinión superficial que puede desarrollarse a partir de un espectáculo. Este laboratorio de crítica cuenta con un estudio a fondo de los principales teóricos del teatro mundial, ya que esta fuente será necesaria no solo para el análisis de una obra teatral, sino para entender el devenir del teatro uruguayo, así como de otras intervenciones.
Cómo se ha formado un actor desde los orígenes de nuestro teatro, cómo se han construido las salas, quiénes son los dramaturgos más interpretados, son preguntas a responder aquí, es un modo de entender la historia del teatro en Uruguay y cómo nos posicionamos como espectadores, y cuál es nuestra función hoy. De este modo nos centraremos en el análisis de las obras que se encuentran en cartel actualmente, por eso tiene una metodología teórica práctica, se trabaja con el hecho artístico en pleno proceso de muestra y difusión. Se abordarán espectáculos del circuito oficial, circuito independiente, teatro under, intervención en espacio urbano, espectáculo circense y teatralidad del carnaval. La variedad de manifestaciones artísticas permite un acercamiento no solo a la diversidad de géneros, también abre en el espectador nuevas posibilidades de conocer una obra que se aleja de la sala convencional que el teatro puede proponer.
Ante los diversos géneros es necesario indagar en diferentes teorías y momentos del teatro, por eso habrá autores de cabecera como Konstantín Stanislavski, Vsevolod Meyherhold, Jerzy Grotowski, Antonin Artaud y Eugenio Barba. No hay que olvidar que los espectáculos performáticos necesitan de otras herramientas teóricas, partiendo desde los años ´60 hasta la actualidad, más precisamente en Argentina y Uruguay. Los contenidos tendrán su inicio desde conceptos de Platón y Aristóteles, pasando por la semiótica teatral, los géneros teatrales desde la teoría literaria y la elaboración de una crítica periodística.
Ante la abundancia de teatro nacional, este laboratorio permitirá que el espectador se centre en una comprensión crítica de la representación, sin caer en la racionalización absoluta de lo que observa. La interpretación de todos los códigos presentes permitirá un diálogo que enriquece el saber y dirige al teatro a un camino más fértil donde los que se encuentran en la butaca son individuos exigentes, que en su análisis, la obra se convertirá en un proceso que se asienta en lugares inesperados de la interpretación.