Liberar Mosul costó cerca de 11.000 vidas humanas

Entre 9 mil y 11 mil personas murieron en los nueve meses de batalla transcurridos para libertar la ciudad de Mosul del poder del estado islámico, según las conclusiones de una investigación llevada a cabo por  Associated Press. El número de víctimas civiles es diez veces mayor que lo que se informara inicialmente .Ni la coalición liderada por los Estados Unidos , ni el gobierno iraquí ni el califato extremista reconocen  los datos, según la agencia de noticias. Las fuerzas iraquíes o de la coalición son responsables por al menos 3.200 muertes de civiles en ataques aéreos entre octubre de 2016 y la caída del El en la ciudad en julio de 2017 según la investigaciones de AP, que  reunió datos de depósitos de cadáveres e informaciones proporcionadas por organizaciones no gubernamentales. La mayoría de las victimas aparecen simplemente como “desaparecidas” en informaciones derivadas del Ministerio de Salud. La coalición que no envió nadie a Mosul con el fin de investigar, apenas admite la responsabilidad de 326 de las muertes. -Fue el mayor ataque a una ciudad en dos generaciones y murieron millares de personas-afirma Chris Woods, responsable por  Airwars una organización independiente que documenta ataques aéreos y de artillería en Irak y Siria .La institución compartió su base de datos con  AP-Comprender como murieron esos civiles, y obviamente el Estado Islámico tiene un rol fundamental en eso ya que podría ayudar a salvar muchas vidas la próxima vez que sucediera algo similar. El desinterés por cualquier tipo de investigación es muy desalentador. Más allá de la base de datos de Airwars,  AP analizó informaciones de Amnistía Internacional, Irak Boduy Count y un informe de las Naciones Unidas. La agencia tuvo acceso a una lista de 9.606 nombres de personas muertas durante la campaña de liberación. El documento fue elaborado por la necrópolis de Mosul.Se cree que centenas de civiles se encuentran sepultados debajo de los escombros dejados por los combates. De las casi 10 mil  muertes documentadas por AP, cerca de un tercio ocurrió en bombardeos de fuerzas iraquíes o de la coalición liderada por los Estados Unidos. Otro tercio se debe a la última ola de violencia diseminada por los militares del estado Islámico. Sobre el resto de las muertes no fue posible identificar los responsables. Sin embargo el total de cadáveres de la necrópolis puede superar ampliamente a los registros oficiales. El primer ministro de Irak, Hadair al-abadi dijo a AP que 1260 civiles murieron en los combates. La coalición internacional no dio el total. La alianza fundamenta sus investigaciones en imágenes grabadas por drones, videos de cámaras colocadas en equipamientos militares y observaciones de pilotos -La coalición nunca ser acercó a nosotros ni envió a nadie para pedir datos. Nunca  vieron nada de forma directa o indirecta-afirmó  afirmó Hatem Ahmed Sarheed,  uno de los dos iraquíes responsables por el registro de muertos en  Mossul. Un reportero de AP visito la necrópolis seis veces en seis semanas y hablo decenas de veces por teléfono con funcionarios del lugar. Los americanos dijeron que no tenían recursos para enviar equipo alguno a Mossul. Debido a que la colación  lo consideró como insuficiente, la mayoría de las acusaciones de muertos civiles no se consideran “creíbles” antes de comenzar una investigación. La coalición defendió sus decisiones operativas, afirmando que fue el grupo del EL que colocó los civiles en riesgo al asumir el poder -Simplemente es irresponsable admitir las critica de las bajas involuntarias causadas por la guerra de la coalición para derrotar al EL-afirmó el coronel Thomas Veales, portavoz de la coalición a AP-Sin la campaña área o terrestre de la coalición de forma inevitable se hubieran ocasionado daños, o décadas adicionales de sufrimiento y muerte y mutilaciones innecesarias en Siria e Irak en manos de los terroristas que carecen de cualquier patrón ético o moral. Lo que está claro de acuerdo a las estimaciones es que conforme la coalición y las fuerzas de gobierno iraquí intensificaban su ofensiva, creció la tasa de civiles muertos en las manos de sus libertadores. Antes de la batalla para expulsar al EL, en Mosul vivían más de 1 millón de personas. Temiendo una enorme crisis humanitaria el gobierno iraquí lanzo panfletos del cielo y pidió a los soldados que avisasen a las familias para ocultarse delante del inicio de la batalla final a fines de 2016. Cuando los combates cruzaron al oeste del rio Tigre  el año pasado los combatientes del grupo EL llevaron miles de civiles consigo en  su salida. Colocaron centenas de familias en escuelas y edificio de gobierno de rehenes. Esperaban que esa estrategia lograse disuadir los ataques aéreos y de artillería pero estaban engañados. Cuando las fuerzas iraquíes vieron su avance estancado a fines de diciembre, el  Pentágono ajustó las normas sobre el uso de fuerza aérea, permitiendo que comandantes con menos supervisión en la jerarquía del comando ordenasen ataques aéreos. Conforme la lucha se concentraba en la zona oeste de la ciudad, los registros de la necrópolis se llenaron de civiles que habían muerto “explotando en pedazos”. En febrero y a comienzos de marzo, los informes de muertes civiles comenzaron a dominar las reuniones de planeamiento militar en Bagdad, según un diplomático occidental de alto rango que estaba presente pero no tiene autorización para comentar nada públicamente. Cuando emergieron acusaciones en derredor de  que un único ataque de la coalición había matado centenas de civiles en el barrio de al-Jadidah en Mosul, el 17 de marzo  todos los combates fueron interrumpidos por tres semanas. Bajo una intensa presión internacional, la coalición envió por la primera vez una equipo de la ciudad que terminó concluyendo que la bomba de 226 quilogramos que mató 105 personas estaba justificada para matar dos franco-tiradores del estado Islámico. Las fuerzas especiales iraquíes  recibieron instrucciones de no pedir ataques aéreos sobre edificios. En vez de eso, fueron instruidos para solicitar ataques de la coalición sobre jardines y calles adyacentes a focos del grupo extremista. Un grupo de Whatsapp conformado por asesores de coalición y fuerzas iraquíes para coordinar ataques aéreos antes llamado «Matando Daesh 24/7» (en referencia al acrónimo árabe para el Estado islámico) cambió su nombre por “Asustando Daesh 24/7” -Estaba claro que toda estrategia en Mossul occidental tenía que reconfigurarse- afirmó el diplomático. Pero sobre el terreno agente de las fuerzas especiales iraquíes dijeron que después de una pausa  volvieron a combatir como antes. Él grupo de WhatsApp volvió a llamarse “Matando Daesh”