Hacete socio para acceder a este contenido
Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.
ASOCIARMECaras y Caretas Diario
En tu email todos los días
En su discurso, Nin Novoa recordó que en 1994, cuando se retiró de la Intendencia arachana, «el presupuesto de la misma era de 53 millones de pesos. De los mismos, 43 millones eran producto de los impuestos municipales y 10 millones eran aportados por el gobierno central».
Luego agregó que «hoy, 25 años después, el presupuesto de la citada Intendencia es de más de mil millones de pesos, de los cuales, el 45% corresponde a ingresos por concepto de ingresos departamentales y el 55% es aportado por el gobierno nacional, como producto de la tarea de descentralización que se ha llevado a cabo en los últimos quince años», puntualizó.
Acto seguido agregó que «esos recursos que vienen del gobierno central permiten pagar toda la masa salarial de los empleados públicos, con lo cual uno tiene la seguridad de preguntarse? ¿puede haber déficit con un aporte del gobierno central tan importante?».
Agregando: «Me parece que no. Lo que se puede y se debe hacer, es darle eficiencia al uso de los recursos», culminando esa parte de su discurso con esta exclamación: «Ojalá hubiera tenido, siendo intendente, un aporte de esa naturaleza».
Para tener una idea más acabada de lo que representó la descentralización en términos de asignación de recursos, baste decir que el gobierno nacional aporta a la Intendencia de Montevideo (IM) el 11% de sus recursos, el resto se obtiene a través de la recaudación. Mientras casi 23 mil millones de pesos de recaudación anual coresponden se obtienen de esa manera, 2.600 millones se obtienen a través de aportes del gobierno central. Son cifras que invitan a pensar.