Este jueves el MPP culminó los encuentros con los precandidatos frenteamplistas. En esta ocasión fue el turno de Óscar Andrade primero, y de Mario Bergara después. Luego de las reuniones, ambos dialogaron con la prensa.
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Pasadas las 16 horas, culminó el encuentro con Andrade. Consultado sobre la reunión, el precandidato aseguró que «hubo coincidencias». Según Andrade, «el problema principal no es que las políticas sociales no hayan dado resultados en el sentido de tener indicadores de pobreza muy inferiores a los que teníamos en el 2004, es que no hemos logrado empoderar en las políticas sociales como que eso es una conquista social de las que tenemos que estar orgullosos», indicó.
Para Andrade, «la principal batalla que tenemos que dar en el campo popular tiene que ver con los componentes culturales, y para eso la relación de la izquierda con los movimientos sociales es una parte muy importante», sostuvo. También coincidió en que el Estado tiene que tener un papel importante en un momento de contracción de la economía para reactivarla «es algo que hemos defendido todos estos años», así como que es necesario colocar un esfuerzo importante en infraestructura y vivienda, por ser multiplicadores de los puestos de trabajo sin requerir mayor calificación para el ingreso y porque tiene desencadenamientos productivos.
Andrade repitió algo que viene diciendo desde hace mucho: que Uruguay ha tenido en los últimos años los mejores indicadores de su historia, pero que la riqueza sigue estando concentrada en el 1% de la población, y en ese punto considera que en la renta empresarial no puede pagar lo mismo el pequeño comerciante, industrial, etcétera, que el grande.
El precandidato reconoció que el déficit fiscal es alto y que el programa colocará el tema de la vivienda y la atención a la infancia: «El tema de la vivienda nos ayuda en otro eje que es central: que haya más trabajo, que es lo principal. Uno puede pensar que pasen dos cosas, una lluvia de inversiones y que el precio de los comodities se catapulte». Opinó que si se diera ese escenario sería ideal, pero si no, «el Estado tiene que participar en la economía para apalancarla para que haya desarrollo económico», sostuvo, y afirmó que está seguro que el apoyo político del MPP lo tiene, separando ese tipo de sostén con lo que es el apoyo electoral. Pero dejó claro que lo que le interesaba era lo primero.
Mario Bergara, por su parte, dijo que «el sistema tributario que emergió de la reforma tributaria no es rígido, no se congeló en el tiempo, de hecho tuvo muchas variantes en todos estos años y creo que lo que está planteado en el borrador de programa tiene las características de ser cosas de variantes marginales en el sentido de la recaudación o de la carga tributaria. Todas estas modificaciones que se han hecho en todos estos años en el terreno tributario, no han modificado el esqueleto que sigue vigente, tanto del objetivo como de la reestructuración del sistema tributario. Por lo tanto, estamos abiertos a discutir, sobre todo lo que pueda tener un sentido de equidad», aseguró, a la vez que agregó: «Entendemos que es difícil pensar en cambios drásticos en la carga tributaria», indicó.