Tal como lo informó Caras y Caretas el pasado 1º de marzo, el asesinado empresario Gonzalo Aguiar simuló el copamiento de su casa y el robo de un arsenal.
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En febrero del año pasado la residencia La Maison fue copada por 4 hombres. Uno de ellos se desempeñaba allí como guardia de seguridad.
Según se denunció, después de golpear a varias personas, incluso al padre de Aguiar que estaba en el lugar, los sujetos se llevaron un cofre fort, unas 20 armas de “colección” y miles de municiones.
El arsenal estaba compuesto por: diez pistolas marcas Berreta, Luvo CZ, Colt, Canik, Glock, Sig Sauer, Taurus y Bersa entre otras; cinco rifles marcas Mossberg y Steyr; una escopeta marca Doruk; dos sub ametralladoras marcas Sti y Uzi; un fusil marca Norico y un revólver marca Taurus..
El mismo día la policía detuvo a dos presuntos copadores y al otro día cayeron los otros. Todo lo robado se recuperó.
El juez penal de 4° turno de Maldonado, en proceso abreviado, condenó a dos como autores de un delito de tráfico de armas y municiones. En tanto a los otros dos se les aplicó una pena de 12 meses de libertad vigilada, que incluían 4 meses de arresto domiciliario total y otros 8 de arresto domiciliario nocturno.
Uno de los detenidos enfrenta una posible condena a 22 años de prisión.
Un dato curioso que ahora se ve de otra forma, es que en ninguna de las noticias que se dieron sobre el copamiento se informó el nombre del dueño de casa y nunca se vio su imagen, simplemente se le mencionaba como “un empresario”.
Ayer se realizó una nueva audiencia en fiscalía en la que la defensa del principal acusado debía presentar nuevas pruebas.
Propuesta indecente
Según señalaron, Aguiar atravesaba graves dificultades económicas, por eso le propuso a su defendido “simular el hurto” de las armas “que ya tenía vendidas en el mercado negro” y de una camioneta por la que cobraría seguro. “Era solamente entrar y salir” les aseguró.
El empresario Aguiar había desconectado las cámaras de video vigilancia de la mansión una semana antes de los hechos. “E incluso, a pesar de la mansión que tenía justo el día del copamiento se había ido a descansar a Piriápolis”, dijeron los abogados Jessica Tonkovic y Federico Graña.
“El robo se produjo a la medianoche, pero recién se llamó a la policía a las 7 de la mañana”, agregaron.
El padre de Aguiar estaba en la casa
“Pero hubo un imprevisto”, afirmaron, “ya que el día del asalto estaba el padre de Aguiar en la casa, quien se suponía no debía estar allí”.
Los abogados afirmaron que “su defendido no estaba armado y no golpeó a nadie, sino que se limitó a cargar el armamento en el vehículo. Las armas no estaban en ninguna bóveda sino dispuestas sobre un escritorio”. Y agregaron que “ninguno de los supuestos copadores tiene antecedentes judiciales”.
Uno de los guardias detenidos declaró que “vio a Aguiar descartarse de un bollón lleno de cocaína en un inodoro”. También dijo que “consumía grandes cantidades de droga”. Y finalmente que “las armas ya habían sido exhibidas a gente rara, presumiblemente compradores de las mismas”.