Los blancos se preparan para lo que viene: una dura interna. Con alrededor de 300 personas se concretó este fin de semana en La Paloma el congreso de Todos Hacia Adelante del Partido Nacional.
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Durante el encuentro intentaron con poco éxito patear para delante el tema de las candidaturas, pero la interna ya comenzó a vivirse y quedó claramente reflejada este sábado.
La insistente prédica de que "es mejor hablar de candidaturas más adelante" fue tan recurrente entre los asistentes y los oradores, que terminó siendo el tema más presente. Sobre todo después de escuchar a Álvaro Delgado hablar en notorio tono de candidato único en plena campaña.
Más allá de las palabras y de los silencios, quedó claro que los blancos se juntaron en La Paloma para la foto que los muestre unidos, fumando la pipa de la paz, antes de la guerra.
Sin Lacalle Pou, con una única candidatura asegurada (Álvaro Delgado) y otras todavía en veremos (Argimón, Raffo, García, Lema), el Partido Nacional le puso punto final a Todos Hacia Adelante y abre un nuevo escenario a partir de hoy.
El "Luisismo" intentó, sin formalizarlo, patentar este nuevo nombre para el sector, dejando repetidas veces en claro que aunque ya no estén "Todos juntos", lo que verdaderamente importa es pedirle a la militancia el esfuerzo por defender a capa y espada a la administración de Lacalle Pou.
Como frutilla de la torta de la Paloma de la paz, prepararon un video final con los logros del gobierno, destacando "la baja de los delitos", mientras se veía parado en primera fila al ministro Heber, muy transpirado por el calor agobiante o por los nervios de tanta exposición pública y mediática.
Tampoco podía faltar entre las "conquistas", por supuesto, el cumplimiento de las metas fiscales.
Los discursos trajeron las arengas propias de un vestuario antes de la "gran final". "Estamos haciendo un gran gobierno. Hay que defender a capa y espada a la administración de Lacalle Pou", dijo el presidente del directorio del Partido Nacional, Pablo Iturralde .
"Hay que poner toda la carne en el asador. Este es un año de gestión”, lanzó el intendente de Rocha, Alejo Umpierrez, uno de los más vehementes al pedir "una defensa más dura de Luis Lacalle Pou".
Por su parte Álvaro Delgado, parado en su rol de "candidato seguro" se mostró un escalón arriba del resto de los dirigentes que lo miraban de reojo, y se lanzó a la campaña acusando al Frente Amplio "de no asumir nunca la derrota".
“No tiene ni rumbo, ni rol, ni proyecto. Su única motivación es la crítica. Y muchas veces cayendo en el ridículo”, criticó en tono de candidato.
Le siguió en la palabra Javier García, quien para no quedarse atrás con los aplausos, aprovechó su minuto de fama para lanzarse con nombre y apellido contra los dirigentes del Frente Amplio. "Ahora dicen que el gobierno no tiene rumbo. ¿Lo habrán escuchado? Señora Cosse, señor Pereira, señor Orsi, el rumbo está claro y es la libertad”, dijo levantando la voz para recibir la ovación de la blanca tribuna.
Por último, Beatríz Argimón, mucho más medida, cerró los discursos y mandó un mensaje hacia la interna: “No perdamos de vista que el proceso que inició nuestro presidente tuvo que ver con una mirada del Partido Nacional que se modernizó y que debe seguirlo haciendo. Nosotros vamos a estar. Porque si hay algo claro es que acá hay un equipo comprometido con el gobierno, con el país y también con el Partido Nacional”, concluyó la vicepresidenta.