Los créditos se tienen que pagar a medida que vencen y ese es uno de los puntos en el caso de la Asociación Uruguaya de Fútbol .El BROU concedió renovar el crédito de 7.5 millones de dólares a la AUF, pero la incertidumbre está en si el organismo rector del fútbol podrá amortizar el préstamo sin que a su vez se le liberen fondos.
Hacete socio para acceder a este contenido
Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.
ASOCIARMECaras y Caretas Diario
En tu email todos los días
Pasados 180 días del vencimiento, en caso de no pagar, el cliente pasará a ser categoría 5, es decir, irrecuperable. Cualquier cliente que pasa 180 días o más sin pagar un crédito pasa a ser calificado 5 de forma automática.
La Asociación Uruguaya de Fútbol tiene un plazo hasta mayo para dejar de ser deudor con capacidad de pago muy comprometida; es decir, abandonar la categoría 4 y amortizar el préstamo que le concedió el Directorio del Banco República. Si excede ese plazo sin hacer frente a la línea de crédito, que se vio reducida de 9 a 7.5 millones de dólares, no sólo se convertirá en deudor irrecuperable, sino que su deuda deberá ser absorbida por toda la sociedad.
Fuentes consultadas indicaron a Caras y Caretas que lo que genera incertidumbre es si el cliente con dificultades financieras —como lo es la AUF— genera o no los fondos para pagar cuando vencen los créditos y, además, cómo recompone las garantías. En tanto, ante la renovación de la línea de crédito planteada en noviembre por la Asociación Uruguaya de Fútbol, el Directorio del Banco República la aprobó por mayoría con la resolución previa favorable de las áreas comerciales y de riesgo de la entidad bancaria. Y aunque la aprobación de la renovación de la línea de crédito resolvió algunas condiciones, Caras y Caretas pudo saber que, hasta hoy, se desconoce si la AUF las cumplió o no, o si es posible que las cumpla.
Si bien el deudor que se encuentra bajo la categoría 4, como el caso de la AUF, en principio no podría acceder a préstamos bancarios, en caso de un viejo cliente como es el organismo rector del fútbol, igualmente puede acceder tras haber “caído” en esa categoría. Según conoció Caras y Caretas lo que está vedado es otorgar crédito a un cliente nuevo que es categoría 4. Sin embargo, fuentes consultadas indicaron que, más allá de que la política del BROU permita prestar a un cliente categoría 4, “hay que ser muy cauteloso en el manejo del riesgo, ya que la categoría 4 es indicador de dificultades financieras. Categoría de riesgo de crédito 4 significa cliente con capacidad de pago muy comprometida”.
Como se recordará, Caras y Caretas informó que el fiscal Gilberto Rodríguez retomará la investigación con los interrogatorios en calidad de imputados desde el presidente de la AUF, Ignacio Alonso, al resto de la directiva y Comisión Fiscal a partir de febrero de 2025. Este medio informó que los denunciados prometieron al fiscal una auditoría internacional para intentar explicar los presuntos faltantes en el último balance de la AUF.
La Asociación Uruguaya de Fútbol precisamente llegó a la degradación de Cliente categoría 4 “porque tiene una compleja situación financiera: pérdidas importantes en los últimos ejercicios y patrimonio negativo” (con más deudas que activos). Por ello, a partir de este panorama, la resolución de la mayoría del Directorio del BROU “precisa más atención porque hay que mirar muy de cerca los riesgos del cliente cobrando el crédito cuando se vaya amortizando sin volver a liberar fondos”, indicaron fuentes de la investigación consultadas.
El punto sobre la misma garantía presentada para un fideicomiso que para la renovación de la línea de crédito solicitada al BROU es una posible irregularidad que el fiscal Gilberto Rodríguez investigará especialmente. Caras y Caretas conoció que esta situación vinculada a la garantía “podría significar que el cliente quiso engañar al banco al ofrecer una garantía que también le ofreció a otro acreedor, al tiempo que también significa que la garantía del banco está debilitada al haber sido cedida a otro acreedor”, indicaron las fuentes, que agregaron que en un escenario u otro la presentación de la misma garantía para un fideicomiso y para solicitar un préstamo de un banco arroja un escenario por lo menos irregular.
Ante este panorama, la pregunta es si la AUF podrá pagar al Banco República o se convertirá en un cliente irrecuperable cuya deuda deberá ser absorbida por el BROU, es decir, por la sociedad toda. Fuentes consultadas del organismo rector del fútbol respondieron que “se espera que pueda pagar con la generación de los nuevos fondos pedidos como condición para la renovación de la línea de crédito”, aunque las mismas fuentes indicaron que se desconoce si esa condición pudo o puede ser efectivamente cumplida. En tanto el fiscal de Delitos Económicos y Complejos, Gilberto Rodríguez, y el departamento contable de Fiscalía analizan los balances presentados por los doce clubes denunciantes de la actual directiva de la Asociación Uruguaya de Fútbol y las respuestas aportadas por los denunciados, tras el balance presentado por el presidente de la AUF, Ignacio Alonso, imputado por la denuncia que investiga Fiscalía por desviación de fondos, se restableció la línea crediticia, aunque sólo con los votos de la mayoría del directorio —presidente Salvador Ferrer, directores Alejandro Lafluf y Max Sapolinski—, es decir, con excepción de los directores del Frente Amplio y Cabildo Abierto, Leandro Francolino y Pablo Sitjar. En tanto, la Comisión Fiscal de la AUF confirmó la pérdida patrimonial de más de 8 millones de dólares producida en el último ejercicio, si se compara el patrimonio de la AUF entre 2021 y 2023. La pérdida registrada entre esos dos balances coincide con el préstamo solicitado al BROU.