La utilización de artefactos de pirotecnia representa un riesgo para la salud y su manipulación incorrecta puede ocasionar graves lesiones físicas, tales como quemaduras, problemas auditivos y daños oculares irreversibles.
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Las partes del cuerpo que suelen resultar más afectadas por accidentes de pirotecnia son las manos, los ojos, la cabeza y el rostro. Más de la mitad de las lesiones son quemaduras. La mitad de las personas afectadas son niñas y niños, ya que no tienen la coordinación requerida para usar este tipo de productos en forma segura.
RIESGO PARA LA SALUD:
a. Quemaduras: en manos, rostro, en vía aérea, etc.
b. Traumatismos y/o cortes: impactos de objetos en miembros superiores y/o inferiores, amputaciones parciales o totales de mano o pies, heridas rostro u otros daños
c. Lesiones oculares: daños transitorios o permanentes en la vista.
d. Trauma acústico: lesiones auditivas, sobre todo a los niños más pequeños o bebés, el hecho de estar próximo a la deflagración que cause demasiado estruendo puede causar problemas en los oídos, desde un trauma acústico que dure unos días hasta incluso problemas de audición. Estos daños si son padecidos por niños, la lesión es más grave, por tal motivo se entiende que ellos deben estar alejados de dichos dispositivos.
En caso de usar pirotecnia el Sistema Nacional de Emergencias (Sinae) recomienda:
- Usar solamente los únicos productos pirotécnicos autorizados, es decir los habilitados por el Servicio de Material y Armamento (SMA).
- Leer detenidamente y seguir todas las instrucciones y advertencias presentes en los productos autorizados.
- No permitir que niños o niñas usen fuegos artificiales. Deben ser encendidos y usados sólo por personas adultas.
- No consumir bebidas alcohólicas u otras drogas antes de encender o mientras se encienden fuegos artificiales.
- Usar los fuegos artificiales en un área exterior, abierta y despejada, lejos de sectores con peligro de combustión (edificios, vehículos, arbustos) y nunca en zonas arboladas. Evitar encenderlos durante la presencia de fuertes vientos.
- Usar los fuegos artificiales en una superficie estable y plana.
- Encender los fuegos artificiales uno a uno con un palo largo o con una antorcha, apartándose la mayor distancia posible.
- No apuntar, tirar o disparar cualquier tipo de fuego artificial a personas o propiedades.
- Tener cerca un balde con agua, una manguera o un extinguidor de incendios para situaciones de emergencia.
- Nunca tratar de volver a encender fuegos artificiales que no han funcionado en el primer intento. Tampoco utilizar alcohol para encenderlos. Si un fuego artificial no se enciende, esperar por lo menos cinco minutos y entonces sumergirlo en agua antes de desecharlo.
- Almacenar los fuegos artificiales en un lugar fresco y seco, nunca cerca de fuentes de calor (se aconseja no dejarlos expuestos al sol).
Ante un incidente relacionado con fuegos artificiales, se recomienda:
- Consultar en forma inmediata al médico y/o a emergencia móvil.
- Si cae fuego sobre la ropa, se lo debe sofocar envolviendo a la persona afectada con una manta o haciéndola rodar sobre el suelo. La víctima no debe caminar y menos aún correr.
- Si se produce una quemadura más leve, se recomienda lavar la zona lesionada con agua fría para calmar el dolor y frenar la acción calórica, así como cubrir esa misma zona con paños limpios, toallas o sábanas.
- Evitar el uso de “remedios caseros” tales como pasta de dientes, tomates, tabaco y miel, entre otros.