La directora de la OPS (Organización Panamericana de la Salud) Carissa Etienne sostuvo que «La llegada de una nueva variante no significa necesariamente que las cosas vayan a empeorar, pero sí significa que debemos estar más atentos».
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La variante descubierta en Sudáfrica el 24 de noviembre, se ha expandido por África, Asia, y gran parte de Europa hasta el momento. Varias zonas han experimentado un repunte de casos, y se asegura que la variante es más contagiosa que la Delta, pero se desconocen hasta ahora la gravedad y los efectos concretos relacionados a la cepa.
La región comenzó a experimentar el ascenso de casos en países como Bolivia, Perú y Colombia y distintos países del Caribe, aunque no tienen casos confirmados de Ómicron.
Uno de los puntos de mayor preocupación de la nueva variante es su aparentemente alto nivel de reinfección, es decir, la capacidad de infectar a personas que ya han tenido antes la enfermedad y habían desarrollado por ello anticuerpos naturales contra el coronavirus.