"Venezuela denuncia ante la comunidad internacional la peligrosa realización de ´ejercicios militares´ por parte del Gobierno de Trinidad y Tobago entre el 26 y 30 del presente mes, bajo coordinación, financiamiento y control del Comando Sur de los Estados Unidos, acción que constituye una provocación hostil contra Venezuela y una grave amenaza a la paz del Caribe", destaca el texto.
"Renunció a la soberanía"
Asimismo, consideró que el Gobierno de la primera ministra trinitense, Kamla Persad-Bissessar, renunció a la soberanía de Trinidad y Tobago para actuar como colonia militar de EEUU, convirtiendo su territorio en un portaviones de Estados Unidos para la guerra en todo el Caribe contra Venezuela, Colombia y toda Suramérica.
"No se trata de ejercicios defensivos: se trata de una operación colonial de agresión militar que busca convertir al Caribe en un espacio para la violencia letal y el dominio imperial estadounidense. Esta política entreguista y traicionera de los principios constitucionales de Trinidad y Tobago, ha terminado golpeando al propio pueblo trinitense: pescadores inocentes han sido víctimas de ejecuciones extrajudiciales en el mar Caribe", resalta el texto.
De igual manera, Venezuela manifestó que no acepta amenazas de ningún gobierno "vasallo" de EEUU y aseguró que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana permanecerá alerta y movilizada en unión militar y policial ante esta "gravísima" provocación.
Campaña y bandera falsa
Washington lleva adelante una campaña militar en esa región argumentando que lucha contra el tráfico de drogas, por lo que desde agosto desplegó tres buques con 4.000 soldados en aguas cerca de Venezuela.
El movimiento se produce en medio de las crecientes tensiones entre ambos países, después que la fiscal general de EEUU, Pamela Bondi, anunciara una recompensa de 50 millones de dólares por información que condujera a la captura del presidente venezolano Nicolás Maduro, a quien acusa de liderar una organización narco llamada cartel de los Soles.
Venezuela solicitó el apoyo del secretario general de la ONU, António Guterres, ante lo que consideró una "amenaza" de EEUU en el Caribe.
A la vez, el Gobierno de Maduro movilizó milicianos y reforzó sus fronteras para enfrentar cualquier intento de EEUU de ingresar a su territorio.
(Sputnik)