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La Policía allanó un establecimiento rural en Soriano, propiedad de quienes despacharon los contenedores que transportaban la cocaína incautada en el puerto de Montevideo. En el lugar los funcionarios hallaron otra tonelada de la droga escondida en una tolva.
El jueves fueron incautadas casi cuatro toneladas y media de cocaína escondida en contenedores de soja.
Investigadores de la Policía llegaron hasta un establecimiento rural de Soriano, propiedad de Luis Murialdo Garrone, desde donde salió la droga.
Según informa el portal El Eco, de Colonia, que Murialdo “era un pequeño productor hortícola y de pronto hace unos años pasó a mover grandes sumas de dinero, comprando maquinaria, alquilando campos, viajando a Paraguay, pero a la vez tenían deudas bancarias de gran envergadura”.
“Su esplendor económico, surgido de un día para otro, generaba desconfianza, en voz baja se decía que en “algo grande anda”, agrega.
Tras una orden de captura emitida por la Justicia ambos fueron detenidos. El fiscal del caso, Enrique Rodríguez, tomó declaración a los detenidos este viernes.
Jaime Borgiani, director de la Dirección Nacional de Aduanas dijo en conferencia de prensa que hasta el momento se llevan contabilizados «4.418 kilos y queda un contenedor más por abrir».
Aseguró que la droga se cargó «cerca de Nueva Palmira» en Soriano. Por otro lado, comentó que el precio estimado de la droga es de US$ 1.000 millones en Europa.
Según informó Agencia Soriano (Agesor) la empresa exportadora es el establecimiento «Las Camelias», establecimiento propiedad de Luis Gastón Murialdo Garrone.
Se estima que el destino final de la carga era el Puerto de la Ciudad de Lome, capital de Togo, África.
