Desde hace más de diez años, Adeoms operaba sin un acuerdo vigente que regulase el uso de licencias sindicales. La ausencia de ese marco generó vacíos que, según el gobierno, derivaron en licencias extensas, muchas sin justificación ni control.
En paralelo, se anunció que se iniciará la elaboración de un nuevo convenio colectivo entre la Intendencia y Adeoms para establecer pautas claras y actualizadas sobre este tema.
Reacción de Adeoms
Desde Adeoms, la resolución fue recibida como una agresión al derecho sindical. El sindicato la calificó como un intento de “desprestigiar la organización” y afirmó que la medida busca dificultar el funcionamiento de los representantes gremiales.
En un comunicado difundido tras la movilización del 12 de agosto, ADEOMS sostuvo que el gobierno departamental “eligió comenzar su gestión enfrentándose a los trabajadores”, recortando derechos y “atacando a la organización sindical” pese a las señales de apertura al diálogo. El sindicato denunció una “campaña permanente para estigmatizar” a las y los funcionarios municipales, responsabilizándolos de la situación económica de la comuna, mientras —según señalan— se realizan designaciones directas y se otorgan compensaciones.
“Los derechos conquistados se defienden, el retroceso no es opción”, advirtió el gremio, que reafirmó su compromiso con la negociación colectiva pero aseguró que no renunciará a las medidas de lucha cuando se intenten “destruir derechos y conquistas históricas”. La organización subrayó su orgullo por “la tradición de lucha” de más de 70 años y reiteró que continuará apostando al diálogo, aunque “eso no significa renunciar” a la movilización en las calles.