Hacete socio para acceder a este contenido

Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.

ASOCIARME
Noticia destacada |

Carreras de drones: El deporte del futuro

Los drones continúan avanzando en tecnología y propósitos, ya no sólo se usan con fines audiovisuales o fotográficos, sino que los aficionados de estas naves no tripuladas le encontraron una utilidad que ya se transformó en tendencia mundial: el drone racing o carreras de drones.

Suscribite

Caras y Caretas Diario

En tu email todos los días

En nuestro país, se está organizando la tercera carrera que se llevará a cabo el próximo 7 de octubre. Caras y Caretas habló con Martín Gava, integrante de la comunidad de aficionados de este deporte.

Las carreras de drones, o también llamadas carreras de FPV (sigla en inglés que hace referencia a vista en primera persona), comenzaron como un deporte amateur en Australia a finales de 2014, y cada vez son más las personas que incursionan en esta disciplina a lo largo del mundo.

Este deporte implica controlar por radio pequeños aparatos voladores utilizando unas gafas especiales, similares a las de la realidad virtual, con el objetivo de tener una visión en primera persona del trayecto del dron, sintiendo que realmente están piloteando la nave en las alturas. De esta manera, los pilotos sólo visualizan lo que ve el dron a través de su cámara. Esta sensación de abandonar el espacio terrenal, aunque sea por unos minutos, ha conquistado aficionados en todo el mundo.

Martín Gava, miembro de la comunidad Drones de carreras.uy, nos contó que esta actividad surgió, a nivel mundial, hace aproximadamente cuatro años y que en nuestro país ya se crearon las primeras comunidades de aficionados a este deporte. “En nuestra comunidad hay aproximadamente 60 personas, y con algunos de ellos nos juntamos todos los fines de semana para volar”, contó.

El piloto aseguró que este deporte suma cada vez más adeptos y que actualmente “cualquiera lo puede hacer”, ya que los costos del equipo se han reducido mucho. Un dron de carrera ronda entre los 130 y los 500 dólares según la calidad, las gafas varían entre los 50 y los 600 dólares, y la radio tiene un costo desde 100 dólares en adelante. “Con 300 dólares podés acceder a un equipo básico para comenzar a aprender”, afirmó.

El aficionado señaló que existen dos tipos de drones: aquellos más livianos, que pesan aproximadamente 280 gramos y poseen una potencia que llega 200 km por hora; y los drones destinados al vuelo libre, que suelen pesar 500 gramos y su velocidad máxima es de 140 kilómetros por hora.

Según Gava, quienes practican este deporte deben hacerlo con especial cuidado y acatando las normas dispuestas por la Dirección Nacional de Aviación Civil e Infraestructura Aeronáutica (Dinacia) que es el ente encargado del marco regulatorio y la seguridad operacional de esta práctica en el espacio aéreo.

Es por ello que los pilotos de drones, a la hora de salir a volar, optan por hacerlo en espacios grandes y poco transitados para asegurarse de no cruzarse con otras personas. “Hay reglas básicas que se deben respetar, como no sobrevolar cerca de la gente ni superar los 120 metros de altura. La idea es no generar inconvenientes ni lastimar a ninguna persona ajena al deporte”, explicó Gava.

En 2015 se fundó la Asociación Uruguaya de Drones (AUD), que surgió ante la necesidad de nuclear las diferentes ramas de esta nueva tecnología que plantea, según su propósito, diferentes tipos de necesidades, normativas y campos de trabajo. Según expresó el aficionado, la AUD comunicó recientemente que, luego de una ardua gestión con la Intendencia de Montevideo, se logró la habilitación de zonas exclusivas para vuelo de drones en Montevideo, ya que la actual reglamentación prohíbe expresamente el vuelo de drones sobre personas y áreas pobladas, como así también en zonas prohibidas y restringidas. Al momento, las autoridades de Dinacia están evaluando dicha habilitación y sólo resta la autorización oficial. Las zonas dispuestas para el uso de drones serían el parque Barofio, el parque Marcos Sastre, el parque Miguelete y el parque Tomkinson.

Al parecer, esta actividad llegó para quedarse, y por esta razón, la Dinacia, la AUD y los participantes activos de esta tecnología están trabajando en la difusión y concientización del uso del dron con el objetivo de que este nuevo entretenimiento pueda realizarse de forma segura, controlada y que no interfiera en la buena convivencia de la población.

 

“Vivirlo para entenderlo”

Gava nos describió su experiencia volando drones y comparó la sensación que le genera esta práctica con la libertad. “Cuando estás volando, te desconectás de todo; estas en el aire esquivando los árboles y los pájaros que te persiguen y juegan con el dron. Es un momento de libertad, hay que vivirlo para entenderlo”, expresó.

El pilotó confesó que, para quienes incursionan en la práctica, las primeras sensaciones pueden ser un poco confusas, ya que es posible sentir algún mareo o sensación de inestabilidad, pero en la medida que la persona se acostumbra y se va adaptando, la experiencia es increíble.

“Al comienzo uno le tiene más respeto y cuidado, ya que existen riesgos como la posibilidad de golpear contra algo y romper el equipo, pero después que te vas profesionalizando podes arriesgar más y buscar espacios con trayectos más complejos y obstáculos”.

 

La carrera

El próximo 7 de octubre se llevará a cabo la tercera carrera de drones en nuestro país en el Centro Técnico de Aeromodelismo (CTA), un club exclusivo para vuelo ubicado cerca de la zona de Sauce, en el departamento de Canelones. Esta carrera es organizada por miembros de la comunidad de drones, quienes se encargan de todo lo relacionado con la gestión, difusión y costos del evento. “Nosotros no tenemos sponsors, costeamos los gastos entre los participantes. Es todo a pulmón”, contó Gava.

La competición, que cuenta con aproximadamente 23 personas inscriptas, consiste en volar un dron, mediante un controlador, en una ruta definida con obstáculos, logrando el menor tiempo posible para llegar a la meta.

La duración de una carrera, por lo general, no supera el minuto y medio, que es el máximo rendimiento de la batería de este tipo de equipos, y se juega en tres vueltas de aproximadamente 30 segundos cada una.

Gava adelantó que en marzo del año que viene se va a realizar el Campus Party en el Centro de Convenciones de Punta del Este, donde se lanzará el campeonato oficial de carreras de drones.

 

Dejá tu comentario

Forma parte de los que luchamos por la libertad de información.

Hacete socio de Caras y Caretas y ayudanos a seguir mostrando lo que nadie te muestra.

HACETE SOCIO