Darío Pérez se siente solo y decepcionado

-Uy, Borges. Antes que nada buenos días. ¡Qué temón de la banda Los Perros, liderada por el magnífico guitarrista Gabriel Carámbula!

-¡Exactamont! Además, integró la mítica selección de la gira El amor después del amor de Fito Páez. Lo fui a ver el 4 de abril de 1994 en el cochambroso Palacio Peñarol y ese mismo año asistí, el 21 de diciembre, al Estadio Centenario.

-Me lo imagino, con sus pelos castaños largos, agitando sin parar.

-¡Exactamont, Álvarez! Agitando sin parar ni un segundo.

-¿Tiene información, Borges?

-Qué pregunta berreta. Tengo los bolsillos llenos de papeles de apuntes.

-Bueno, Borges, lo escucho.

-Tuve una larga charla con el diputado de la Liga Federal, el doctor Darío Pérez.

-El hombre que es señalado como díscolo dentro del Frente Amplio porque no dio su voto en varios proyectos enviados por el Poder Ejecutivo.

-Puede ser. A decir verdad, luego de la conversación de más de una hora que tuvimos, me pareció convincente. Sin pretender juzgar sus actuaciones en el Parlamento, me pareció una persona honesta y fuertemente parado en sus ideales, que pueden ser discutibles o no.

-Cuente, Borges.

Darío Pérez se siente solo y decepcionado. Le indigna que le achaquen la implosión del Frente Liber Seregni, cuando lo único que hizo fue acercarse al Nuevo Espacio para armar una alianza electoral.

-Upa…

-Me dijo el diputado carolino que es “incomprensible” la actitud de Alianza Progresista de alejarse del sector liderado por el ministro de Economía, Danilo Astori. Considera que fueron los de Alianza los que fracturaron el conglomerado al acordar con el candidato al Senado Mario Bergara para ingresar en la lista oficial del expresidente del Banco Central del Uruguay (BCU).

-Pero, Borges, ahí había incompatibilidad de caracteres con el exintendente de Maldonado, Óscar de los Santos.

-Se equivocó la paloma, se equivocaba, de acuerdo a lo que me manifestó Darío Pérez. Me dijo que no tenía ningún problema personal con el Flaco, sino visiones distintas sobre el país y las estrategias para encaminarlo.

-¡A la pipetuá!

-Asimismo, el legislador me aseguró su lealtad con el proyecto del FA. Me dijo que, por ejemplo, en el año 2006 se reunió con el presidente Tabaré Vázquez para advertirle sobre los problemas de inseguridad que estaban penetrando en el país. En ese momento, el ministro del Interior era el socialista Jorge Díaz. Sostuvo que hicieron oídos sordos a su reclamo y que, en la actualidad, el departamento de Maldonado está asolado por la pasta base y la frenética proliferación de las bocas de droga.