Hacete socio para acceder a este contenido

Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.

ASOCIARME
Deportes Luis Rubiales | Jennifer Hermoso | fiscal

Por agresión sexual y coacción

Piden dos años y medio de cárcel para Luis Rubiales por beso a Jennifer Hermoso

Fiscal pidió una pena de dos años y medio de cárcel para el expresidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, por agresión sexual y coacciones.

Suscribite

Caras y Caretas Diario

En tu email todos los días

La Fiscalía de la Audiencia Nacional (AN) de España pidió condenar a dos años y seis meses de cárcel al expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, por el beso no consentido y las presuntas coacciones posteriores a la jugadora de la Selección femenina, Jennifer Hermoso, durante la celebración del campeonato del mundo obtenido el 20 de agosto de 2023 en Sidney (Australia).

Los tres acusados

La teniente fiscal de la AN, Marta Durántez, pidió también un año y seis meses de prisión para los otros acusados en el caso, el director deportivo de la selección española masculina, Albert Luque, el exentrenador de la selección española femenina y actual seleccionador femenino de Marruecos, Jorge Vilda, y el exresponsable de marketing de la RFEF Rubén Rivera.

El ministerio público solicitó para Rubiales la inhabilitación para trabajar en el ámbito deportivo durante el tiempo de condena, dos años de libertad vigilada y la prohibición de comunicarse con la jugadora y acercarse a ella a menos de 200 metros durante cuatro años. Asimismo, quiere que indemnice a la internacional con 50 mil euros. Es la misma cantidad que reclama a los otros tres acusados, aunque en su caso, de manera conjunta y solidaria.

El juez de la Audiencia Nacional, Francisco de Jorge, consideró por finalizada la instrucción del caso el pasado 14 de marzo con la toma de declaración a la actual seleccionadora Montse Tomé y se reafirmó en los argumentos expuestos en su primer auto de pase a procedimiento abreviado del pasado enero, en el que consideraba que el beso a la jugadora “no fue consentido y fue una iniciativa unilateral y sorpresiva” del investigado Luis Rubiales.

Las presiones de Luis Rubiales a Jennifer Hermoso

El escrito de acusación de la teniente fiscal describe una conducta de Rubiales “sorpresiva y sin consentimiento ni aceptación” de Jenni Hermoso cuando, durante la entrega de medallas del Mundial, la “sujetó la cabeza” con ambas manos y le “propinó un beso en los labios”.

La Fiscalía también acusa a Rubiales de presionar de manera “constante” y reiterada a la futbolista y a su entorno para que “justificara y aprobara” el beso que le dio “contra su voluntad” ante “las consecuencias personales y profesionales” a las que éste podría enfrentarse.

Una “situación de hostigamiento” de la que también responsabiliza a los otros tres acusados, “personas de confianza” de Rubiales que accedieron a sus cargos “bajo su mandato” y cuya “privilegiada situación en la RFEF” dependía de la “suerte” que éste corriera.

Según la fiscal, las presiones comenzaron en la salida de los vestuarios, todavía en plena celebración, cuando Rubiales “instó” a Hermoso a declarar públicamente que el beso era consentido. Continuaron en el autobús, de donde “se le obligó a bajar” para que suscribiera un comunicado redactado por la RFEF “por orden” de Rubiales, cuyo “contenido no compartía” y que fue remitido a los medios y también en el vuelo a España, donde el expresidente federativo volvió pedir que hiciese una declaración conjunta con él, a lo que ella volvió a negarse.

La coacción del entorno de Rubiales

La Fiscalía sostiene que la “negativa reiterada” de Hermoso llevó a Rubiales y a su “equipo de confianza” a utilizar “otra vía”: presionar supuestamente a sus familiares.

El escrito recoge que Jorge Vilda intentó que el hermano de la jugadora la convenciese ante la advertencia de que, si no hacía la declaración pública, habría “consecuencias negativas para ella”.

Días más tarde, en el viaje a Ibiza de varias jugadoras, la Fiscalía sostiene que Rubén Rivera acudió a la isla e insistió a Hermoso en que hablase con el responsable de integridad de la RFEF, órgano que había abierto un expediente en el que “se pretendía, por orden” de Rubiales, “su exculpación”.

Pese a que la internacional se negó y pidió “que la dejaran en paz”, la fiscal acusa a Rivera de seguir insistiendo e intentar presionar también a una amiga que la acompañaba para que Hermoso hablase con el cuarto acusado: Albert Luque.

Según el ministerio público, éste también se desplazó a Ibiza para conseguir que la jugadora participase en un vídeo exculpando a Rubiales. Fue al hotel donde se alojaba y acabó enviando varios mensajes a su amiga en los que acusaba a la jugadora de “mala persona, deseándole que se encuentre muy sola en la vida y anunciándole que se alegraría si eso sucediera”.

Fuente: AS

Dejá tu comentario

Forma parte de los que luchamos por la libertad de información.

Hacete socio de Caras y Caretas y ayudanos a seguir mostrando lo que nadie te muestra.

HACETE SOCIO