El Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (Sunca) paralizó las obras en la planta de UPM, que se está construyendo en el departamento de Durazno, tras una denuncia de acoso laboral hacia una funcionaria y por el despido de dos trabajadores.
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La paralización inició el pasado miércoles cuando la trabajadora denunció persecución sindical por parte de un capataz de una empresas subcontratada.
El presidente de Sunca, Daniel Diverio, en declaraciones a Radio Universal, dijo que “una persona con ese nivel de agresividad hacia mujeres, no podía estar al mando de esas mujeres”.
Además, aseguró que el motivo del paro no es la búsqueda de “premios ni sueldos”.
Por otro lado, el dirigente opinó sobre el trabajo de mujeres en las obras, reconociendo que «hay un tema cultural y de la empresa de machismo que las mujeres no pueden ingresar en la construcción».
En tal sentido, aseguró que a la empresa ingresaron «excelentes oficiales y trabajadores de la construcción».
«La compañera entró a trabajar en la construcción, salió sorteada. Un capataz con la cabeza retorcida le hace hacer tareas muy duras”, explicó.
El gremio de la construcción está reclamando que la empresa retire al capataz de la obra mientras se dilucida la investigación. «Una persona con ese nivel de agresividad hacia mujeres, no podía estar al mando de esas mujeres”, expresó Diverio.
«Esa persona debe esperar fuera de la planta hasta que se dilucide la investigación tras la denuncia, añade el gremio. “Creemos que hay dos discursos de la empresa. Un tema tan sensible lleva a paralizar la planta. No estamos parados por premios ni por sueldos, sino por machismo en la sociedad”.
Doble discurso
Sobre la posible solución de esta situación, expresó: “Se sale negociando. Es cierto que el ministerio ha estado llamando y buscando alguna alternativa. Hubo propuestas, hoy se está analizando una propuesta de salida”.
“No es que estamos esperando un hecho para salir a la calle”, dijo señalando que desde que iniciaron las obras experimentaron dos situaciones de conflicto.
Según consignó el mencionado medio, UPM declaró que el hombre tiene un contrato con la empresa y es la empresa quien se encarga de los vínculos laborales.
De acuerdo a este punto, Diverio dijo que UPM tiene «doble discurso» y que «es quien contrata a esas empresas». A su entender, «debería tener responsabilidades en saber a quién contrata”.
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