La empresa Caedot nació fruto de un desafío. Un desafío que un grupo de trabajadores, orgullosos de su profesión, decidió aceptar hace 10 años para el desarrollo de la enfermería a domicilio. “Se trata de una empresa creada con base en necesidades del Casmu, en particular con la coyuntura de inyectables en ese tiempo. Desde ese momento hasta ahora lo que ha venido ocurriendo es que hemos ido adquiriendo servicios o los hemos generado, porque hay servicios que antes no se brindaban y ahora sí”, explicó a Caras y Caretas el director de la Compañía Auxiliares de Enfermería Domiciliaria y Traslados (Caedot), Juan Corbalán. “Somos un grupo de trabajadores que en su momento nos conformamos como cooperativa, lo que nos llevó a generar esta suerte de otro empleo. Mi responsabilidad como conductor de la firma es lograr que esa visión que teníamos como trabajadores y que tenía que ver con la calidad en la asistencia y el compromiso con el trabajo se plasme en la realidad y eso es lo que nos trajo hasta acá”.
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La empresa, que brinda servicios al Casmu, tiene entre sus objetivos brindar “el mejor servicio de enfermería domiciliaria. Creemos y estamos convencidos de que estamos dando pasos firmes en ese sentido y eso hace que hoy hayamos logrado crecer”. Destacó que la empresa supera los 150 trabajadores. “No es una empresa menor y lo demostró durante la pandemia”, subrayó.
En sentido recordó que Caedot se hizo cargo del “cien por ciento de los hisopados domiciliarios del Casmu, como ya nos habíamos hecho cargo anteriormente con la campaña contra el dengue, como con las campañas de vacunación, y hoy nos encontramos con esta nueva situación de la viruela del mono. Fue nuestra empresa, Caedot, la que hizo la toma de muestras del primer paciente. Fuimos nosotros con el equipo de Diego López, responsable de nuestro departamento de Enfermería”.
La empresa desarrolla todas las tareas relativas a la internación domiciliaria del Casmu, pero ha agregado cuidados paliativos, laboratorio, sistema de cuidados, análisis de sangre y carné de salud.
“Contamos con un laboratorio, en el que el Casmu ha instalado equipos que lo transforman en un laboratorio de primer nivel. Con un cuerpo médico bajo las directivas del director técnico del Casmu, el doctor Carlos Russi, pero que hacen que sea complementario a nuestras tareas”, explicó.
Sobre los servicios complementarios, agregó que entre estos se cuenta con un sistema de cuidados. “Es el primer servicio que realmente le da al paciente en el domicilio todos los cuidados de enfermería que el paciente necesita”, subrayó. Y agregó: “No es un servicio de acompañantes, pero es un servicio donde va un equipo y hace todo lo que el paciente necesita, principalmente educación para prevenir lesiones”.
Otro servicio es el de una unidad especializada, “que la impulsamos hace pocas semanas”, que se dedica a la prevención y cuidado de la piel, además de curar. “A su frente está la licenciada Romina Villarruel, una de las más calificadas del medio para la tarea, junto con la licenciada Daniela Gargiulo”, agregó.
“La gente acá, por ejemplo, no marca tarjeta, pero sabe lo que tiene que hacer y cumple de forma rigurosa con su tarea”, agregó Corbalán respecto a las condiciones en las que el personal de Caedot trabaja. “Nuestra empresa cumple en forma rigurosa con las mejores condiciones de trabajo con nuestro personal y ellos responden con la misma rigurosidad y profesionalismo en la atención”, subrayó.
Trabajo en la pandemia
En otra parte de la entrevista Corbalán se refirió al trabajo desarrollado por Caedot durante los peores momentos de la pandemia de covid-19.
“Durante la pandemia, en la primera ola, llegamos a los 80.000 hisopados y tuvimos que mezclar la tarea con la cobertura, por ejemplo, en el área naval”, precisó. Eso quiere decir que debían atender a las tripulaciones de los barcos atracados frente a Montevideo. “Íbamos, tres o cuatro horas de lancha, desde el puerto a los atracaderos de los barcos a hisopar tripulaciones completas en acuerdo con navieras que contrataban al Casmu. Fueron decenas de procedimientos de ese tipo”.
En cuanto a las perspectivas, Corbalán señaló que se centran en “tener la mejor enfermería domiciliaria posible. No por el hecho de que queremos la mejor empresa, sino porque queremos lograr el mejor de los servicios. Eso es una premisa para nosotros. Queremos eso por el compromiso innato que tenemos con la profesión. Realmente somos enfermeros y queremos recuperar lo perdido y es ese humanismo lo que nos lleva a ver la atención de la enfermería de una forma totalmente diferente. Eso está en los libros, en la capacitación se decía que bañar a un enfermo es parte de nuestra tarea. No es tan natural hoy, es como que eso lo debe hacer alguien más y no un enfermero. Nosotros vamos por otro camino”.
“Nosotros queremos prevenir y trabajar con el adulto mayor en su derecho a que se le enseñe y que lo cuiden antes que se lastime. Y saber que el cuidado de la piel es fundamental al igual que hidratarse o usar el calzado adecuado. Y que tenga un equipo de enfermeros y una empresa que lo acompañen”, concluyó.
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