Los hitos establecidos incluyen electrificar el 50% de la flota para 2030, el 75% para 2035, y llegar al 100% en 2040.
Inversión del proyecto
El proyecto de electrificación implica una inversión aproximada de 110 millones de dólares, destinada tanto a la adquisición de buses como a la infraestructura necesaria para su operación. Gran parte de estas obras se están llevando a cabo en las plantas de José Añón, Veracierto, Gronardo e Islas Canarias, que estarán equipadas para cargar múltiples unidades de manera simultánea. La planta José Añón, por ejemplo, tendrá capacidad para cargar hasta 170 buses a la vez.
En cuanto a la próxima licitación para los 59 buses adicionales, aún no se ha definido la fecha, ya que depende de los avances en las obras de infraestructura. Sin embargo, CUTCSA ha avanzado considerablemente en este aspecto, con proyectos como la planta Veracierto, cuya finalización está prevista para julio de 2025, y las plantas de Gronardo e Islas Canarias, que estarán listas en diciembre de ese mismo año.
Uno de los puntos más relevantes del plan de electrificación es su impacto en las líneas suburbanas, donde se espera que el 75% de los buses sean eléctricos y completamente accesibles para principios de 2025, lo que representa una mejora significativa para los usuarios del área metropolitana. Además, CUTCSA ganó una licitación para operar el bus turístico de Montevideo con seis unidades eléctricas, que comenzarán a circular a finales de 2024.