La Intendencia de Montevideo (IM) comunicó que impartirá cursos de lenguaje inclusivo dirigidos a los funcionarios ya que una resolución firmada en 2010 establece la obligatoriedad de su uso en actos administrativos y de comunicación institucional.
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Esta situación avivó el debate sobre la perceptividad del idioma inclusivo y dejó en evidencia las primeras resistencias a su utilización.
El edil nacionalista Diego Rodríguez Salomón elevó un pedido de informes a la administración del intendente Cristian de Di Candia consultando sobre el carácter obligatorio de esta disposición. Según consignó Montevideo Portal, consideró «inentendible y poco serio» que se obligue a trabajadoras y trabajadores a usar el lenguaje inclusivo que, dijo, «no está reconocido por la Real Academia Española».
Otra de las participantes del debate fue la senadora nacionalista Graciela Bianchi, quien entendió la decisión de la IM como una limitación a la libertad. «El lenguaje inclusivo no sólo es adoctrinamiento por una ideología, sino también hacernos más ignorantes. Las autoridades publicas no pueden imponernos hablar incorrectamente el idioma español», escribió en su cuenta de Twitter.
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