EEUU procura asegurar su presencia en la hidrovía Paraná-Paraguay debido a que, en el marco del conflicto en Ucrania, crece su importancia por ser paso de gran parte del comercio de granos y minerales del Cono Sur americano, advirtieron miembros del Parlamento del Mercosur (Parlasur) en diálogo con la Agencia Sputnik.
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Para los legisladores, la posible colaboración del Cuerpo de Ingenieros del Ejército de EEUU en las tareas de dragado (limpieza y ahondamiento) de ese corredor natural de transporte fluvial de más de 3.400 kilómetros de largo, anunciada por el embajador estadounidense en Paraguay, Marc Ostfield, y respaldada por el Gobierno de Mario Abdo Benítez, es nada menos que "injerencia militar".
"El Gobierno de Abdo Benítez pareciera ser que busca quedar bien con los intereses norteamericanos y de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) (…) Estamos en un momento en donde la humanidad necesita de alimentos y energía. Así que la intervención de EEUU con la presencia efectiva de militares tiene este objetivo: conquistar recursos naturales ante el conflicto en Ucrania", dijo a la Agencia Sputnik el legislador argentino Harispe Gastón, del oficialista Frente de Todos (izquierda).
Gastón explicó que el interés de Washington en esta vía que une los ríos Paraná y Paraguay, permitiendo una navegación continua entre puertos de Argentina, Brasil, Bolivia Paraguay y Uruguay, se enmarca en una búsqueda mundial de recursos naturales ante la carestía generada por el conflicto en Ucrania.
Rusia y Ucrania son los principales productores de trigo y cereales del mundo.
"Esos recursos naturales son extraídos del Tercer Mundo, de las regiones como la nuestra, y eso América Latina puede proveerlo. Nosotros no nos negamos a eso. Los argentinos en la posguerra dimos de comer. El problema es que nosotros consideramos que no debe violarse la soberanía nacional, tenemos que resolver los problemas alimentarios y de acumulación del capital a partir del ejercicio de la soberanía", agregó.
Por su parte, el legislador paraguayo por el opositor Frente Guasú (izquierda) Ricardo Canese dijo a la Agencia Sputnik que hay que evitar la "intromisión de EEUU" en la Cuenca del Plata, porque de lo contrario se podría generar un "conflicto extrazona".
"EEUU y la OTAN tienen que lidiar con el conflicto con Ucrania y Rusia, pero de ninguna manera se tienen que involucrar en el Mercosur y en América Latina. Nosotros tenemos que mantenernos como zona de paz", agregó.
La Agencia Sputnik se comunicó con las cancillerías de Argentina y Paraguay, pero no quisieron dar declaraciones con respecto a este tema.
Según la prensa local, el Gobierno paraguayo niega que vaya a haber presencia militar estadounidense.
IMPORTANCIA DE LA HIDROVÍA
El río Paraguay, junto con los ríos Paraná y Uruguay que desembocan al océano Atlántico a través del Río de la Plata, son parte del corredor hídrico de la Cuenca del Plata, donde se ha incrementado el tránsito de bienes, principalmente agrícolas.
"El río Paraguay y (el) Paraná constituyen el complejo agroexportador y quien lo tenga gobierna el comercio exterior de granos y minerales", apuntó Gastón.
Consideró que EEUU quiere tener una "política monitoreada" de la exportación de materias primas y agregó que la zona incluye la radicación de tres fábricas papeleras, que "han trastocado el modo de producción agrícola".
"Se han forestado áreas cultivables, con lo cual se han desplazado a sectores campesinos e indígenas. Colonizan las áreas cultivables porque tienen alta capacidad de riego producto de esta cuenca", agregó.
La zona de la hidrovía también comprende la triple frontera (Paraguay, Brasil y Argentina) y ya "hubo intentos de crear una base (militar) allí; esta cooperación es un precedente para ir escalando en otro tipo de acuerdos", alertó Canese.
A fines de octubre, el Parlasur elevó una nota de protesta a Asunción, en la que se insta que todos los estados partes del Mercosur (integrado por Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay) a realizar planificación conjunta de la hidrovía para desarrollar una política común de integración, evitando "toda injerencia militar externa".
Asimismo, la propuesta de Paraguay también despertó alarmas en Argentina, sobre todo por rechazo de los gobernadores de las provincias del norte, quienes advirtieron el 23 de septiembre su "preocupación" por la "presencia militar de EEUU en la hidrovía", informó el diario argentino Página 12.
CHINA
En la polémica aparece un tercer actor: China. El aumento en la navegación en la hidrovía ha despertado el interés de grandes inversores extranjeros, principalmente chinos, para proyectos de infraestructura tales como dragados, puertos, entre otros.
El interés de EEUU, según los parlamentarios, se ve apoyado también por el posicionamiento de Paraguay como "enclave" estratégico para Washington, al ser el único país de América del Sur que no reconoce en términos diplomáticos a China.
Gastón sostuvo que en la zona de la hidrovía operan empresas de cereales que tienen "capitales transnacioneles", tanto de EEUU, Europa como de China.
"La ocupación militar definitiva nos preocupa desde el punto de vista que pareciera ser que el capital global con EEUU han decidido terminar de resolver una logística extractivita para la región con personal militar (…) Entonces, la extensión o expansión del agronegocio es parte de una política de sometimiento a una condición de países productores de materias primas para las aventuras colonialistas de potencias como EEUU", agregó.
POSICIÓN PARAGUAYA Y ARGENTINA
Según un artículo del diario argentino Página 12 publicado el 17 de octubre, "la hidrovía es tema de un incipiente conflicto entre Paraguay y Argentina, y nueva agenda del Consejo de Seguridad de la Casa Blanca".
El medio informó que "la Cancillería argentina le reclamó a Paraguay explicaciones" por los planes con Washington. Desde Buenos Aires se sostiene que Asunción "no ha cumplido su obligación de informar a los demás países las intervenciones que tiene planificado realizar".
Además, Argentina propuso la aplicación de un peaje para el tránsito internacional de embarcaciones de carga en el tramo del río Paraná, comprendido entre el puerto de Santa Fe y la confluencia con el río Paraguay.
El 22 de octubre, Abdo Benítez aseguró que no recibió reclamo formal alguno por parte del Gobierno argentino, informó el diario paraguayo Última Hora.
También consideró que no corresponde que Argentina cobre peaje en la hidrovía y aseguró que esta propuesta resta competitividad a la región.
(Por Lucía Barrios, vía Sputnik)