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Política

Germán Cardoso

La renuncia que calentó las contradicciones en el Partido Colorado

Desde el piso 11 de la Torre Ejecutiva, los herreristas del gobierno balconeaban las grescas entre los colorados en los pisos inferiores, observando desde una suficiente altura para que la coalición no termine salpicada. Bastante se ven obligados a zurcir los multicolores por un lado con Cabildo Abierto, marcando constantemente perfil, y con el Partido Colorado, el socio más firme, que cambió tres ministros en menos de un año y medio.

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El Partido Nacional no fue el único que balconeó el lío entre colorados. Los integrantes del sector Ciudadanos del Partido Colorado también miraron con bastante distancia el conflicto entre el ex ministro de Turismo Germán Cardoso y el director de esa cartera, Pérez Banchero.
Si se mira en la perspectiva histórica, las contradicciones entre el integrante de Batllistas (Cardoso) y Pérez Banchero (mas próximo a la lista 15) era hasta previsible.
La mala votación de las huestes de Sanguinetti o, si se quiere, el histórico triunfo de Ernesto Talvi, había llevado al sector del ex presidente (Batllistas) y los de la 15 a una alianza a contrapelo que fue la creación de la lista Batllistas Unidos.
Los huérfanos de líder tras la renuncia de Talvi, en tanto los reacomodos en las bancas parlamentarias no los afectaban, observaron el desarrollo de los acontecimientos más preocupados en no aparecer en el candelero público que el conflicto había desatado. Los problemas que el Partido Colorado debe afrontar claramente son más importantes que el nuevo lugar de las fichas.
Cardoso ocupó su banca de diputados, Batllistas se aseguró su ministerio con la designación de Tabaré Viera y Pérez Banchero se fue para fungir de asesor parlamentario del senador Raúl Batlle.
Por delante le queda a los colorados sanear la imagen de un ex ministro que renuncia tras denuncias de corrupción desde sus “propias filas” y la renovación en el liderazgo del partido.

Nuevo tablero

El politólogo Oscar Bottinelli, consultado por Caras y Caretas, expresó que en “el caso de Julio Maria Sanguinetti y su sector, quedó sin presencia en el Senado, pero se fortaleció a nivel del Poder Ejecutivo, con una fuerte presencia que mantiene en Diputados”.
Cuando Raúl Batlle aceptó su lugar en el Senado, la lista 15 desplazó a Batllistas del único lugar que tenían en la cámara alta, mas allá de las declaraciones del propio Batlle de no tener inconvenientes en volver a ceder la banca si Tabaré Viera retorna, permitir alguna suplencia a la integrante de Batllistas Elena Grauert y reconocer el peso político del liderazgo de Sanguinetti. En tanto, ese mensaje conciliador hacia la interna colorada del empresario y novel senador e hijo del dirigente y expresidente Jorge Batlle se acompaña de afirmaciones con respecto a Cardoso de que “nadie renuncia si las acusaciones en su contra son falsas” y define como asesor de su despacho al denunciante, Pérez Banchero.Bottinelli asegura que Sanguinetti afirma su presencia en el Poder Ejecutivo con un dirigente de peso no solo en la colectividad colorada, sino entre los multicolores, como es el actual ministro de Turismo, Tabaré Viera.
Viera no es un dirigente cualquiera. Su peso político viene dado no solo por su experiencia al frente de distintas responsabilidades institucionales (Parlamento, intendente, OSE), sino también por pertenecer al departamento que históricamente ha sido hegemónicamente colorado como Rivera.

“Sanguinetti es el autor de la coalición multicolor”, recuerda Bottinelli, y “la presencia de Tabaré Viera en el Ejecutivo -lo que lo lleva a conversar directamente con las autoridades del gobierno nacional- le asegura a Sanguinetti un canal directo que recuerde que el gobierno no es solo de los herreristas”.

En julio del año pasado Sanguinetti se vio obligado a advertirle a su socio mayor que “el Partido Nacional debe asumir que este no es un gobierno blanco, sino multicolor”.
En la interpelación que el Frente Amplio llevó adelante en el Senado contra el ministro herrerista Luis Alberto Heber con respecto al contrato en el puerto, Tabaré Viera expresó al igual que el senador Domenech de Cabildo Abierto que no habían sido consultados sobre el tema.
Asimismo, Sanguinetti utiliza su peso político para, junto con otro líder colorado emergente, el ministro de Ambiente, Adrián Peña, generar la imagen a la interna de la coalición de un partido confiable.

La renovación

Bottinelli recordó que ante los reiterados y estrepitosos fracasos electorales del Partido Colorado, esa colectividad inició procesos de renovación en los que emergió la figura de Pedro Bordaberry, llevado adelante durante diez años, hasta que el segundo intento fue el de Ernesto Talvi con resultados auspiciosos, abortados por su extraña renuncia, no solo al ministerio, sino a la política en general.
“Pedro Bordaberry está pidiendo pista”, dice Bottinelli.
“Todas las semanas emite una columna de opinión, y en esta última, sobre los hechos acaecidos con el aplazamiento de Germán Cardoso, no duda en tirar dardos hacia su propia colectividad”.
Bottinelli tiene la visión de que buena parte de la preparación de esa “pista de aterrizaje” para el retorno de Bordaberry la está preparando el senador Germán Coutinho.

Fragmento de la carta de Bordaberry a Lacalle

“Te escribo para pedirte que no aflojes. Vienen momentos complejos, se termina la luna de miel y, pasada la pandemia, los uruguayos vamos a mirar la situación económica.
Si no lo hacemos, desde la vereda de enfrente van a gritar para que la miremos. Ya lo están haciendo. Lo hicieron el miércoles pasado en la Piedra Alta.
Es lógico.
Eso sí, hay que poner un poco de orden en el cuadro.
Empecemos por los del equipo con el que simpatizo. No te podemos cambiar tres ministros en un año y medio. Sé que no es culpa tuya, pero hay que parar eso. Tampoco proponer leyes que ponen impuestos por más loable que sea el fin al que quieren destinar lo que se recaude. Somos el partido de gobierno y esas cosas o las peleas públicas entre nosotros no ayudan.
Están los tuyos también, que tienen que entender que hay que ser cuidadosos hasta en los detalles. No se puede comprar un par de cuadros por varios miles de dólares, por más que esté dentro de la legalidad. No es momento. Tampoco pueden contratarse nuevos funcionarios en la CTM o aumentar su presupuesto en un par de millones de dólares. Más cuando su presidente fue el candidato a intendente y con seguridad volverá a serlo. Se ve de lejos, se nota.
El general es un hombre de bien, pero tiene un grupo demasiado heterogéneo. Su partido todavía está con los dolores del crecimiento. Los más cercanos leen mucho a Methol Ferré y se sienten cerca de la ‘Patria Grande’ de los Kirchner, Mujica, el MPP y Chávez. Hay otros que están lejos de esto, pero hablan más del ayer y las injusticias que sienten se cometieron que del futuro. Algunos no queda claro bien para dónde van. Están contra la forestación, las modificaciones a la ley de medios y otras yerbas que los acercan a Tucho.
Hasta los De la Gente te armaron un lío. La casa en la loma de la ballena y el candidato a diputado procesado en Paysandú.
Cómo te complican el partido […] El cuadro tiene que darse cuenta de que el éxito del gobierno de la coalición republicana es la única posibilidad de éxito de ellos el día de mañana. ¿Cómo van a convencer a sus votantes que van a gobernar sin esta coalición? La necesitan tanto como tú”.

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