Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) continúan atacando el campamento de Jabalia dejando un saldo no menor de 250 muertos.
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Un violento tercer ataque en el campamento de Jabalia en la Franja de Gaza dejó un saldo de decenas de personas muertas y un número indeterminado de heridos.
Las FDI atacaron por primera vez el campo de refugiados de Jabalia este martes. El ataque provocó el derrumbe de varios edificios y, según diversas estimaciones, costó la vida de entre 50 y 100 personas y dejó varios centenares de heridos. Un día después se produjo un nuevo ataque contra el sitio, que también causó la muerte de decenas de civiles.
Aviones de combate de Israel atacaron varios puntos, la zona más afectada fue el vecindario al-Karama en la calle al-Hoja, justo en el centro de Jabalia.
Se estima que tras los tres bombardeos que sostuvo Israel sobre Jabalia en Gaza hay un saldo no menor de 250 muertos, 800 heridos y más de 200 desaparecidos.
A pesar del repudio internacional contra la masacre llevada a cabo contra los palestinos en la Franja de Gaza, las Fuerzas de Defensa de Israel siguen atacando a puntos civiles como Jabalia para presuntamente localizar a miembros de Hamás.
La mayoría de las víctimas de la violenta arremetida del Estado sionista de Israel contra Gaza son mujeres y niños.
Unicef recalcó que 25 días de "bombardeos continuos" han causado la muerte de más de 3.500 niños y dejaron a otros 6.800 heridos, lo que supondría "más de 400 niños muertos o heridos al día, durante 25 días seguidos". "Esto no puede convertirse en la nueva normalidad", se dice en el comunicado.
Asimismo, el organismo reafirmó que "los campos de refugiados, los asentamientos para desplazados internos y los civiles que los habitan están protegidos por el derecho internacional humanitario", y destacó que "ataques de esta envergadura contra barrios residenciales densamente poblados pueden tener efectos indiscriminados y son completamente inaceptables".