El canciller Rodolfo Nin Novoa, defendió el apoyo del gobierno uruguayo a la resolución del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) que llamó a Venezuela a que «reconsidere la convocatoria de las elecciones presidenciales y presente un nuevo calendario electoral». Nin dijo que la resolución es una «exhortación a reconsiderar» la fecha de las elecciones y no es un exigencia.
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La aprobación del gobierno a esa resolución fue cuestionada por varios grupos del Frente Amplio (FA) por entender que se trata de una injerencia en los asuntos internos de Venezuela.
Nin Novoa explicó que el apoyo de Uruguay a la resolución de la OEA fue motivado en que el gobierno venezolano convocó a elecciones de la Asamblea Nacional junto con los comicios presidenciales, cuando el mandato del legislativo está vigente. Afirmó el canciller que el gobierno de Nicolás Maduro «aprovechó» la decisión de la oposición de no presentarse con dirigentes y partidos proscriptos, para ir por la Asamblea Nacional sin oposición.
«Es una elección de partido único que nos preocupa», sostuvo Nin.
Sobre las diferencias que generó la posición de Uruguay en el Frente Amplio, admitió que en relaciones internacionales «hay dos visiones». «Hay una mirada que no cree en una mayor apertura comercial como también hay otra que cree que los valores democráticos son para todos iguales y aunque algunos gobernantes se autodefinan de izquierda tienen posiciones que no son de izquierda porque a mí no me representan. Yo creo que nadie progresista o de izquierda puede sentirse representado por gobernantes que toman determinadas decisiones», sentenció.
«¿Uruguay iría a unas elecciones con dirigentes políticos presos y un Poder Judicial que responde al Poder Ejecutivo?. ¿Iría a unas elecciones con partido proscriptos?”, se preguntó el canciller. Y su respuesta fue: “Yo creo que no y lo que no queremos para nosotros no lo queremos para otros tampoco».
Condenas internas
Ante la resolución de la OEA el Partido Comunista (PCU) declaró “su decidido rechazo ante un nuevo ataque al gobierno y al pueblo venezolano y al carácter claramente injerencista de la decisión tomada”.
Expresó su “profunda preocupación, dolor y rechazo al voto de Uruguay en esta instancia”.
Por su parte, el Movimiento de Liberación Nacional -Tupamaro (MLN-T) consideró “un atropello a la soberanía de Venezuela y una irresponsable reactivación de la violencia en el país».
Para los tupamaros esta violencia es generada «por parte de actores externos, al entrometerse en los asuntos internos de un país soberano».
Mientras tanto Casa Grande, sector liderado por la senadora Constanza Moreira, también rechazó “la decisión del Gobierno nacional de acompañar la moción de la OEA que solicita un nuevo calendario electoral a Venezuela. Consideramos que este pedido implica una injerencia inadmisible por parte de un organismo al que, en otro orden, le ha faltado el mismo rigor para realizae observaciones a países que se han apartado flagrantemente de las normas democráticas y/o de la transparencia electoral como Brasil y Honduras recientemente”.
También el Partido por la Victoria del Pueblo (PVP) expresó su rechazo y “radical condena a la resolución de la Organización de Estados Americanos (OEA) contra el gobierno y el pueblo de la República Bolivariana de Venezuela por su carácter injerencista y violatoria de los Derechos y la Autonomía de los Pueblos”.
“Ante esto manifestamos nuestro profundo rechazo, dolor y preocupación por el voto expresado por el Ministerio de Relaciones Exteriores del Uruguay”, concluye el PVP.