Hacete socio para acceder a este contenido

Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.

ASOCIARME
Sociedad

Parte de guerra

Nuevamente la pobreza con rostro de niño y acento norteño

Los último datos del Instituto Nacional de Estadística señalan que, luego de años, se infantiliza la pobreza, aunque golpea también a los mayores de 65 años y se concentra en el norte del país; Rivera, Artigas y Cerro Largo son los departamentos más pobres al tiempo que Paysandú, Salto y Montevideo son los más desiguales.

Suscribite

Caras y Caretas Diario

En tu email todos los días

El Instituto Nacional de Estadística (INE) divulgó el informe Estimación de la pobreza por el método de ingreso 2020, el último que hará con la base de la Encuesta de Gastos e Ingresos de los Hogares 2005-2006, ya que en agosto se actualizará.

Según surge del mismo, la pobreza pasó de afectar a 8,8% de la población en 2019 a 11,6% de la población en 2020. Eso supuso 99.953 personas que cayeron en la pobreza  para totalizar 409.586 personas en esa situación. Es el tercer año consecutivo en que aumenta la pobreza: de 7,9% en 2017 a 8,1% en 2018, a 8,8% en 2019 y a 11,6% en 2020. Este último guarismo es el más alto desde 2013 (11,5%).

Por su parte, la indigencia se duplicó de 0,2% de las personas a 0,4% entre 2019 y 2020. En 2020 hubo 7.087 indigentes más para totalizar 14.124 personas en esa situación.

Para determinar las personas pobres, el INE utiliza una “canasta básica total línea de pobreza”, que se compone de una canasta básica alimentaria (que determina la línea de indigencia) y una canasta básica no alimentaria. En diciembre, esa canasta básica para determinar la línea de pobreza tenía un valor de $ 16.065. Es decir, una persona con ingresos por debajo de ese monto es considerada pobre y una persona con ingresos por ese monto o más es considerada no pobre.

Para determinar la indigencia, la canasta básica alimentaria tenía un valor $ 4.168 en diciembre.

La pobreza afecta al 21,3% de los niños menores de 6 años, al 20,6% de los niños entre 6 y 12 años, al 18,9% de los adolescentes entre 13 y 17 años. En la franja entre 18 y 64 años, la pobreza afecta al 10,3% de esta población. Solo 2,3% de las personas mayores de 65 años está bajo la línea de pobreza.
Por hogares, a nivel general, la pobreza al 8,1%, pero las cifras varían si el “jefe de hogar” es varón o mujer. El 6,3% de los hogares con “jefe de hogar” varón es pobre, mientras que en hogares comandados por mujeres ese guarismo llega al 10%.

El INE también divulgó diferentes mediciones de desigualdad de ingresos. Una de ellas es el Índice de Gini, un indicador que varía entre 0 y 1. Cuanto más cerca de 0, más repartido está el ingreso y cuanto más cerca de 1, más concentrado está el ingreso.

Es el segundo año consecutivo en que aumenta la desigualdad.

“El análisis del Índice de Gini por departamento permite observar que Paysandú, Montevideo y Durazno son los departamentos con mayor nivel de desigualdad. Por su parte, los departamentos de Maldonado, San José y Colonia son los que presentan los menores niveles”, señaló el informe del INE.

 

De carne y hueso

Con estos datos en la mano salimos a buscar los testimonios en los tres departamentos más pobres del país.

De los tres intendentes -de Artigas, Rivera y Cerro Largo-, solo José Yurramendi, intendente de Cerro Largo, compartió su visión.

Las diputadas del Partido Nacional, Valentina dos Santos de Artigas y Virginia Fross de Rivera declinaron hacer declaraciones.

Lo que pasa es que a pesar de que el aumento de la pobreza tiene su origen en los efectos económicos de la crisis sanitaria, es difícil argumentar porque la transferencia de ayuda a los sectores más vulnerables no fue mayor o no se previó la situación que se vendría.

 

Florecen quioscos

El diputado frenteamplista por Artigas Nicolás Lorenzo contó a Caras y Caretas cómo se fue procesando la profundización de la pobreza en el departamento.

“A partir de marzo del año pasado los trabajadores del comercio y los pequeños comerciantes fueron los más golpeados. En algunos lugares, como una de las barracas mas grandes de Artigas, los empleados se iban rotando en el envío al seguro de paro, pero decenas de comercios cerraron y muchísimos empleados ya no volvieron del seguro. Te dabas cuenta de los que habían despedido con algún peso por que en todos los barrios empezaban a aparecer almacenes y quioscos, chiquitos, con dos o tres artículos básicos y vendidos a granel. Otro elemento que golpeaba y se profundizó sobre este año es que a la gente que comúnmente hurgaba en los contenedores de basura, se empezó a sumar otra gente que te dabas cuenta que habían tenido un trabajo antes. La misma situación en la asistencia de gente laburante que empezó a acudir a algún comedor o merendero”.

 

“Guerra sanitaria y económica”

La frase del subtítulo pertenece al comerciante del departamento de Rivera Holger Vildozola, que se encuentra organizando un grupo de 100 comerciantes de los 400 que aún sobreviven en el departamento, intentando ser escuchados en sus reclamos por las autoridades.

En diálogo con Caras y Caretas, Vildozola sostiene que acompaña todas las medidas que el gobierno viene llevando adelante en la lucha contra la pandemia, pero que hay realidades como la del comercio en los departamentos de frontera que no han sido tomadas en cuenta.

«Acá se nos pidió cerrar los comercios, reducir los aforos, pero yo que vivo a dos cuadras de Livramento me encuentro que están todos los supermercados abiertos, con grandes colas, donde la mitad de los compradores son uruguayos, y si va en auto, no hay un lugar donde estacionar de tanta gente que hay», empieza comentando quien en su momento fuera presidente de los Jóvenes empresarios de Rivera, que pertenecían a las Asociación Comercial de Rivera.

En lo que va de la emergencia sanitaria ya han cerrado mas de 40 comercios, de distintos tamaños y a algunos que se les pidió cerrar por un tiempo seguramente ya no puedan volver a abrir.

«El gobierno nos pide este sacrificio que entendemos necesario en el marco de la pandemia, pero a nosotros no se nos da ninguna ayuda. Aumentaron las tarifas de OSE, de UTE, no contamos con planes que nos permitan solventar los aportes; hoy hay un 30% de empleo que se pudo sostener».

Consultado sobre el anuncio del Poder Ejecutivo sobre ayuda a las pymes, Vildozola sostiene que hay elementos que no se tuvo en cuenta, por ejemplo, la facturación que las empresas están haciendo.

«En mi caso, que tengo un restaurante y que no estoy inscripto como pequeña o mediana empresa, mi facturación actual es igual a una pequeña, por lo que el beneficio del descuento del 50% del IRAE para el aporte patronal no me incluye. Tendría que dar de baja a la empresa y volverme a inscribir, pero dar de baja una empresa es tremendamente costoso”.

Planteó su molestia con los grandes medios de prensa nacionales «que en Montevideo solo muestran a Rivera como el foco de la pandemia y no muestran la crisis económica y social que hay. Está muy bien preocuparse por la compleja situación sanitaria, pero la guerra no es solo sanitaria, sino también económica. Sería bueno que los medios de Montevideo mostraran la cantidad de locales que han cerrado y que están cerrando».

 

Salvo el agro

Tanto el diputado (y actual presidente de la Cámara de Representantes) Luis Fratti, como el intendente de Cerro Largo, José Yurramendi, coinciden en que salvo los sectores de la ganadería, la forestación y el agro, el resto ha sido golpeado por la crisis económica.

Fratti enfatiza que al contrario de lo que pasa en ciudades fronterizas como Rivera y Artigas, aquí el comercio de frontera no es una actividad económica importante, siendo reconocida la actividad de los “kileros”.

Los sectores del comercio han sido los más golpeados y esta situación la conoce bien el intendente Yurramendi, que durante años fue trabajador del comercio. Yurramendi expresa que la intendencia pasó de servir entre los comedores y merenderos municipales de 1.700 platos a 2.200 platos, que por la pandemia se distribuyen en puntos de entrega siendo 12 en Melo, uno en Noblía y otro en Río Branco.

“Cuando se piden medidas para aguantar la crisis, es fácil decirlo por parte de burócratas que tienen su sueldo seguro a fin de mes”, manifiesta Yurramendi, que también comenta que apuesta a que se siga realizando más obra pública en el departamento como única manera de evitar mayor crisis económica y social.

 

Principales resultados para el total del país

 

Indigencia

El total de hogares bajo la línea de indigencia (LI) se ubicó en 0,3%.

El total de personas bajo la línea de indigencia se ubicó en 0,4%.

Pobreza

El total de hogares bajo la línea de pobreza (LP) se ubicó en 8,1%. El total de personas bajo la línea de pobreza se ubicó en 11,6%.

Para el año 2020, en el total del país, la proporción de hogares bajo la LI se estimó en 0,3%. Esto significa que, cada 1.000 hogares, 3 no superan el ingreso necesario para cubrir las necesidades básicas alimentarias. La incidencia de la pobreza se estimó en 8,1%, implicando que cada 1.000 hogares, 81 se encuentran por debajo de la LP.

La estimación de la indigencia a nivel de personas para el total del país señala que, de cada 1.000 personas, 4 no alcanzan el ingreso mínimo previsto para cubrir las necesidades alimentarias básicas. Por su parte, el valor que toma la proporción de personas pobres para el año 2020, implica que de cada 1.000 personas, 116 de ellas no superan el ingreso mínimo para cubrir las necesidades básicas alimentarias y no alimentarias consideradas por esta metodología. (Fuente: INE)

 

Dejá tu comentario

Forma parte de los que luchamos por la libertad de información.

Hacete socio de Caras y Caretas y ayudanos a seguir mostrando lo que nadie te muestra.

HACETE SOCIO