Hacete socio para acceder a este contenido

Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.

ASOCIARME
Mides |

Olivera: Hay un proceso de persecución política a partir del Mides

Según sus palabras, algunos medios de comunicación y el gobierno utilizan la falsedad o las verdades a medias para “enchastrar” a la anterior administración. ¿Cuál es el objetivo? Encubrir el recorte del Estado.

Suscribite

Caras y Caretas Diario

En tu email todos los días

Por Lucía Barrios

La diputada y exviceministra del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), Ana Olivera, dijo a  Caras y Caretas  que las acusaciones que realiza el gobierno contra la gestión del Frente Amplio (FA) en el desarrollo de políticas sociales significa un proceso de persecución política similar al que se vivió en Brasil o Argentina.

Olivera afirmó que algunos medios de comunicación y el gobierno utilizan la falsedad o las verdades a medias para “enchastrar” a la anterior administración. ¿Cuál es el objetivo? Encubrir el recorte del Estado.
“Esto es un proceso de judicialización de la política, que busca generar una opinión pública de forma sistemática, generando verdades a medias, o falsedades. (…) El gobierno del FA no tiene nada que ocultar. Eso es lo que intentamos decir en estos días. A esto hay que decirle basta. ¿Auditoría? Den los datos cuando esté hecha. Pasaremos a la Justicia cuando haya que hacerlo”, afirmó Olivera.

El lawfare o la «judicialización de la política» consiste en el «uso indebido» de la Justicia para fines de destrucción de imagen pública e inhabilitación de un adversario político, explicó el Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELG) en un artículo publicado en su página web.

Muchos analistas creen que las acciones legales que afrontan los líderes progresistas y expresidentes -Cristina Fernández de Kirchner (Argentina, 2007-2015), Dilma Rousseff (Brasil, 2011-2016) Luiz Inácio Lula Da Silva (Brasil, 2003-2011) y Rafael Correa (Ecuador, 2007-2017)- son ejemplos «no aislados» de esa nueva táctica de «guerra no convencional».

El director general del Mides, Nicolás Martinelli, dijo en una conferencia de prensa que desde la semana pasada se conformó una Unidad de Auditoría dentro del Mides basada en un decreto de 2013.

El director explicó que se han resuelto tres auditorías diferentes, las cuales se realizarán en la Dirección Nacional de Discapacidad (Pronadis), en los pagos que hace el Mides a las ONG y en las transferencias y las inscripciones al BPS.
Asimismo, El ministro de Desarrollo, Pablo Bartol, habló de la existencia de «un esquema casi armado» para la desviación de fondos, y negó que Olivera le haya informado que existían deudas con varias ONG.

La exviceministra no se mostró sorprendida por los ataques y aseguró que “es algo que viene de larga data”.

¿Qué piensa sobre las acusaciones contra la gestión del FA en el Mides?
En primer lugar, es una cuestión que viene de larga data. Hubo una concentración en el período pasado de ataques sistemáticos al Mides. Creando la idea de que ahí había caos, visos de corrupción e ilegalidad. Nosotros fuimos convocados, la ministra, yo y varios directores estuvimos nueve horas en una comisión del Parlamento, en la que a las 11 de la mañana, antes de que pudiéramos dar las explicaciones necesarias, la prensa ya hablaba sobre las observaciones del Tribunal de Cuentas.

Se fue construyendo esta idea de que aquí estaba todo mal. Además, hubo anuncios permanentes en la campaña electoral de que lo primero que había que reformar era el Mides. El día que ocurre, las autoridades electas, aun no asumidas, dicen que va a haber auditorias. La auditoría no es la novedad. La novedad es que sin auditoría inmediatamente se largan acusaciones que son casi juicios sumarios. Allí hay un titular de prensa que además genera alarma pública: “Desvío millonario de fondos en el Ministerio de Desarrollo Social”.

Quiero decir con total sinceridad que mientras las auditorías recién comienzan, el domingo, cuando empezaron las acusaciones, no había ninguna hecha. Me tomé el trabajo de ver las noticias. No es solamente el echar un manto de sombra sobre la gestión, sobre la política, sobre las personas, sino que de paso atacan a las organizaciones no gubernamentales. Ellos ya tenían el preconcepto, porque el ministro dijo que “había ruidos”.

Esta forma de acusar arriesga los convenios vinculados con los temas de violencia de género, que trabajan las familias, pero, además, quiero señalar el otro aspecto que es que nosotros dejamos, a pedido del propio director general de secretaría, un reporte completo del estado de las asociaciones no gubernamentales. Nosotros con mucha transparencia le dijimos que tuvimos un momento en que se nos dificultó el control, de que teníamos atrasos, pero que mejoramos mucho porque generamos proyectos para mejorar la gestión. Desde el año pasado tenemos un nuevo sistema informático que mejoró los controles.

¿Y qué piensa sobre la denuncia del Instituto Artigas?
Esa es una acusación aun peor, vinculada con las propiedades del Instituto Artigas. Se dice a vuelo de pájaro que no se sabe a quién le alquilaban, ‘fíjese hay hasta un campo, porque está toda esa cosa del amiguismo´. He dicho fuerte y claro, pero parece que no tiene tanta contundencia, que el Instituto Artigas tiene larga data, fue intervenido en la época de la dictadura, que dependía del Ministerio de Salud Pública, esos campos fueron alquilados en 2002. Ni el Frente Amplio era gobierno ni existía el Mides.

Lo sustantivo es haber generado esta alarma pública dando por sentado que acá hay irregularidades, apropiación indebida, y que muchos vamos a pasar por la Justicia; mientras tanto se desarrollan todos estos cambios en el ministerio, pero hay maneras de hacerlo. Esto genera incertidumbre en cientos de trabajadores y familias. Estamos hablando de profesionales comprometidos que hacen el seguimiento de 1.600 familias en el caso del programa de Cercanías. ¿Cómo va a seguir? Nada de eso aún lo sabemos. Todo esto en el marco que discute en el Parlamento la ley de urgente consideración, en la que hay un achique del Estado, en el medio de una situación de pandemia que va a tener consecuencias sociales muy importantes. Y ante todo lo que lo pueden resolver la explicación la buscan siempre hacia atrás, poniendo en duda los datos que dejó el gobierno anterior.

Sin embargo, el propio director del Instituto Nacional de Estadística de este gobierno aseguró que es imposible que se hayan falseado los datos de las estadísticas entregadas.

También hablan del fracaso de las políticas sociales porque hoy hay gente en situación de pobreza. Lo que no tienen en cuenta es que en las familias, si hay dos personas en seguro de paro, que están perdiendo el 33 por ciento de su salario y no saben si van a volver a trabajar, han visto completamente agravada su situación de vida.
Por eso todas estas cortinas de humo, este circo que están generando busca solamente encubrir lo que no saben hacer.

 

¿Qué es lo que molesta del Mides?
La creación del Mides en marzo de 2005 generó un buque insignia que cambió los paradigmas y se convirtió en la base esencial de las políticas sociales. No es que hicimos lo mismo en los 15 años, se fue modificando y construyendo nuevas políticas con el aporte de la sociedad civil organizada y la Universidad de la República.

Se habla mucho de la falta de evaluación y, sin embargo, nuestro ministerio nace con una Dirección de Evaluación y Monitores de una potencia enorme y con una base de datos que permite infinitos desarrollos para construir política pública. Ahora se anunciaron transformaciones que no se sabe hacia dónde apuntan. Porque en la LUC permiten contrataciones directas, cuando antes hacíamos licitaciones. Lo que se busca es poner en jaque los programas y generar incertidumbres que no sabemos hacia dónde se dirigen. Se habla de llevar a los gobiernos departamentales estos recursos.

En definitiva, este capítulo sobre las organizaciones sociales y los programas de ayuda todavía no se ha cerrado. Dicen que el mantenimiento del Mides es caro, lo que pasa es que hubo un acompañamiento de las personas con derechos vulnerados a través de programas como Cercanías, o Uruguay Crece Contigo o Uruguay Trabaja, que implican la capacitación y acompañamiento continuo. Es una concepción de la política pública la que está en cuestión.

Siempre se ha puesto el centro en las observaciones del Tribunal de Cuentas al Mides y poco en la que se hacen a los gobiernos departamentales, en realidad. Podríamos hablar de una intendencia con fondos aún no rendidos al Mides por las partidas del INDA. Hay una focalización en el Mides porque tiene que ver con la identidad del FA.
Y tiene que ver con el trabajo interinstitucional que permitió la salida de miles y miles de personas de la pobreza por el mundo de trabajo, los convenios laborales, y el trabajo de ruralidad. Socavar en forma permanente el trabajo del Mides con las familias y las personas les permitirá construir otra cosa desde otro lugar.

¿Cree que el FA está enfrentando un proceso de persecución política como el que se vivió en Argentina o Brasil a partir del cuestionamiento del Mides?
Sí. En realidad, esto se inicia con un proceso de judicialización de la política, a eso asistimos en el quinquenio pasado, la judicialización, la generación de una opinión pública de forma sistemática, generando verdades a medias, o falsedades, es un proceso, no es de un momento. Ha habido un trabajo de larga data, hay una aplicación de programa a rajatabla a partir de la ley de urgente consideración, en ese marco, ese programa responde a los cambios comprometidos porque nos acusan porque éramos todos corruptos según ellos. Se intenta generar ese criterio. El gobierno del FA no tiene nada que ocultar. Eso es lo que intentamos decir en estos días. A esto hay que decirle basta. ¿Quieren hacer una auditoría? Den los datos cuando esté hecha. Pasaremos a la Justicia cuando haya que hacerlo.

 

Temas

Dejá tu comentario

Forma parte de los que luchamos por la libertad de información.

Hacete socio de Caras y Caretas y ayudanos a seguir mostrando lo que nadie te muestra.

HACETE SOCIO