Claramente el caso Astesiano es una bomba de tiempo para el gobierno y sus socios de la coalición. Los principales dirigentes buscan tomar distancia para que el escándalo no los salpique.
Hacete socio para acceder a este contenido
Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.
ASOCIARMECaras y Caretas Diario
En tu email todos los días
Varias fueron las voces de referentes que se levantaron en los últimos días marcando sus disidencias con la forma en que el tema está siendo manejado desde la Torre Ejecutiva.
“Si no hacemos nada quedaremos como dice la canción de Shakira, porque nos creíamos una Ferrari y hoy parecemos un Twingo”, expresó con ironía una fuente de la coalición visiblemente molesta por la inacción del gobierno en un tema que le explota en las manos.
Incluso dentro mismo del Partido Nacional salieron las primeras reacciones críticas.
El propio senador blanco Gustavo Penadés dijo que si fuera parte de la oposición, “pediría las renuncias de ministros por el caso Marset y Astesiano”.
“Lo que calienta o fastidia es que esas dos cosas fueron generadas o por gestión del gobierno o por una persona vinculada al gobierno”, agregó con desconsuelo.
El senador entiende los reclamos del Frente Amplio por dos casos que revelan errores del gobierno. “No podemos exigir menos severidad cuando fuimos muy severos estando en la oposición. Creo que con otra categoría, pero igual de severos”, recalcó.
Este domingo, otro nacionalista se sumó a su reclamo. El intendente de Paysandú, Nicolás Olivera, compartió las expresiones de Penadés.
“Eso fue garrón y la oposición se está haciendo un festín. Y además la va tirando en pastillitas, de a poquito. Probablemente si estaba en la oposición estaría diciendo alguna cosa, pero habrá que ver si esto no termina pariendo un ratón. El Partido Nacional probablemente hubiera reaccionado duramente”, señaló.
La posición de Penadés y Olivera no es ajena a los otros sectores de la coalición. El líder de Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos, aseguró que "el caso Astesiano es un grave error" que seguramente tendrá un efecto salpique.