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La idea, según confirmó el legislador, es presentarlo luego de que el ministro del Interior, Luis Alberto Heber, comparezca ante el Parlamento en régimen de comisión general, el próximo 7 de junio.
El senador declaró que hay “600.000 armas de fuego legales registradas y se estima otro tanto ilegales”, lo que coloca a Uruguay “en el quinto lugar en el mundo en cuanto a la tenencia de armas en la sociedad civil”. Bergara explicó que la preocupación por impulsar el proyecto surgió de observar “dificultades para el contralor y el seguimiento de la tenencia de armas” y que “lamentablemente” reciben “noticias de tragedias que tienen que ver con el acceso fácil a las armas de fuego”.
Entre los principales puntos del proyecto, se propone la creación de un 'Consejo Asesor Honorario' “multiagencial y multidisciplinario” que coordinaría el trabajo de los ministerios del Interior, Salud Pública, Educación y Cultura y Defensa Nacional. Asimismo, también estaría integrado por el Poder Judicial, la Fiscalía General de la Nación y la Institución Nacional de Derechos Humanos (INDDHH), además de incluir a la sociedad civil y la academia. A nivel educativo, además, se propone la creación de un "Plan Nacional de Educación para la Convivencia Pacífica", que sería implementado en todos los niveles de la educación pública.
Sin embargo, lo más novedoso está en las propuestas más concretas del proyecto de ley. Por ejemplo, en los casos de violencia de género se facultará a los jueces a ordenar la incautación y custodia de las armas que tenga el denunciado, y se apoya en una estadística: 98% de quienes tienen armas de fuego son hombres, según un pedido de informe que realizaron al Ministerio del Interior.
Entre otras medidas concretas, Bergara señaló que proponen “la reducción de plazos de tenencia, que hoy son cinco años, bajarlo a tres”, además de que se restrinja “el tipo de armas que se pueda tener”, así como la cantidad.
Además, buscarán “aumentar algunas penas vinculadas tanto al tráfico y la comercialización de armas como a la omisión de algunas cosas, como por ejemplo denunciar el robo de armas de fuego o no tener la cautela necesaria para evitar que niños o personas incapaces tengan acceso”.
Bergara recordó, a su vez, que en 2014 el FA “hizo un proyecto de ley en el que se veía que los permisos y las autorizaciones de tenencia estaban aumentando dramáticamente” y citó la estadística: “Algo que era en torno a 2.000 al año, pasaron a 7.500 al año”, y sostuvo que “a partir de la implementación de esa ley los permisos volvieron a ser en torno a 2.000 o 2.500 por año”.
De todas formas, el senador frenteamplista lamentó que exista “un decreto reglamentario del año 2020 que va en la dirección contraria, que flexibiliza, habilita distintos tipos de armas para autorizar, se facilitan algunos procedimientos”, hoy en Uruguay, señaló, “podemos tener semiautomáticas en nuestras casas”.
“Son aspectos generales que tienen que ver con la educación y la cultura, pero también aspectos concretos que apuntan a hacer más controlada la tenencia de armas en el país, con justificaciones más claras, con controles en todos los terrenos, para evitar la proliferación de armas de fuego”, finalizó Bergara.