Por otro lado, el Sidfe destacó que el Plan 2023, implementado en Formación en Educación, fue diseñado para cumplir con la resolución 355 del MEC. Sin embargo, califican esta resolución como una injerencia directa e inconstitucional que fue aceptada sin protestas por el Consejo Directivo Central (Codicen).
Según el sindicato, las autoridades del CFE, "apurados por los tiempos políticos", cometieron numerosos errores en el proceso de implementación del plan, desde plagios hasta la eliminación de carreras y asignaturas, afectando las condiciones laborales de los docentes y expulsando a más de mil profesionales especializados.
La transformación educativa que no fue
También criticaron "el autoritarismo y desprolijidades" de a las autoridades, lo que ha llevado al fracaso de la transformación curricular y al alejamiento de la formación universitaria. Entienden que la actual resolución del MEC "pone en evidencia el fracaso de la transformación curricular y su alejamiento de la formación universitaria, aún en el formato propuesto por el Ministerio, así como la incompetencia y la falta de credibilidad de las autoridades políticas del CFE".
En su crítica, el Sidfe denuncia que tanto el MEC como el Codicen "tienen como objetivo la privatización y fragmentación de la educación superior". Ejemplifican esta acusación señalando la desviación de fondos públicos para financiar posgrados privados y el incentivo a los estudiantes para terminar sus estudios en estas instituciones mediante becas financiadas por el Ministerio.
"Queda en evidencia, una vez más, que las políticas educativas están a merced de los intereses políticos electorales y que se dilapidan recursos económicos jugando con las aspiraciones de miles de jóvenes que desean convertirse en profesionales de la educación", expresa la misiva.
El comunicado concluye con una reflexión sobre la responsabilidad política de las autoridades de la enseñanza, que "prometieron una transformación y orden" que no se materializó. "Lo que hubo fue recorte y caos. Autoridades que buscaron posicionar a los sindicatos de trabajadores y a los gremios estudiantiles como los eternos enemigos internos que impiden los cambios para llevar adelante de forma autoritaria la transformación de la ANEP".
Finalmente, el Sidfe reafirma que "la formación de docentes y educadores necesita convertirse en universitaria", pero insisten en que "el camino para hacerlo es a través de una universidad pública, autónoma y cogobernada, y no mediante títulos de cartón".