La reciente encuesta de Consultora Nómade, realizada entre el 8 y el 17 de enero de 2025, muestra un panorama detallado de las principales preocupaciones y expectativas de los uruguayos, con marcadas diferencias entre Montevideo y el interior del país. Basada en la opinión de 1.025 personas, la investigación pone en evidencia cómo factores como el lugar de residencia, el género y las preferencias políticas influyen en la percepción de los problemas nacionales y el rumbo económico.
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La inseguridad fue señalada como el principal problema del país por el 26,4% de los encuestados, superando al narcotráfico (14,6%), que alcanza un inédito segundo lugar. Estos problemas reflejan una creciente preocupación por la violencia y el impacto del crimen organizado en la vida diaria de los uruguayos. El desempleo (11,6%) y la salud mental también se destacan como desafíos importantes.
Al segmentar por región, emergen diferencias significativas. En Montevideo, la inseguridad alcanza el 33% y es seguida por la pobreza, reflejo de las problemáticas urbanas. En el interior, sin embargo, el narcotráfico se posiciona como la segunda preocupación, y el desempleo adquiere mayor relevancia, probablemente vinculado a las dinámicas laborales fuera de la capital.
Economía
La percepción sobre la economía divide al país. Mientras 1 de cada 3 uruguayos evalúa positivamente la situación actual, el 34,7% de los montevideanos la considera mala o muy mala, cifra que disminuye al 20,9% en el interior. Este contraste podría estar influido por la menor incidencia del desempleo y una mayor resiliencia en las actividades agroindustriales del interior.
Las preferencias políticas acentúan estas diferencias, entre los votantes de Álvaro Delgado, un 55,6% percibe positivamente la economía, mientras que entre los de Yamandú Orsi, el 40,7% la evalúa de forma negativa. Este patrón también se refleja en las expectativas: el 30,7% de los encuestados cree que la economía del país mejorará en 2025, aunque el optimismo es mayor entre quienes respaldaron la fórmula Orsi-Cosse.
A pesar de las evaluaciones económicas generales, casi el 50% de los uruguayos cree que su situación personal mejorará en 2026. Este dato destaca la resiliencia individual en un contexto de desafíos nacionales. Entre los votantes de Orsi, el optimismo alcanza un notable 64,7%, mientras que entre los de Delgado solo el 26% comparte esa expectativa, probablemente influenciados por visiones distintas sobre las políticas públicas futuras.