Todo parece indicar a esta altura que fuimos, una vez más, víctimas de un operativo publicitario y “marketinero” del presidente y su equipo. Ni la información ni el análisis que se multiplica por los grandes medios de difusión responden a la realidad, que se nos quiere ocultar.
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Debemos, sin embargo, diferenciar las cosas ciertas con las que discrepamos y las que consideramos errores cometidos con las mentiras deliberadas, porque de las tres cosas hubo. A veces, aunque suene raro, lo que suena como falta de experiencia es un consciente engaño para ocultar que mienten.
Mienten a los presidentes que les oían sabiendo que lo que decían no era verdad… y mienten a la opinión pública a la que en realidad iba dirigido el mensaje. No había en las palabras del canciller ni del presidente otro rostro frente a ellos, cuando las pronunciaban, que la gente en Uruguay. Hacerles creer que los fracasos son éxitos, disimular la falta de logros. Y distraer la atención, ahora de la inoperancia e insensibilidad ante la crisis hídrica.
Un juego de dos, el canciller, compañero de rugby del presidente, y él mismo, que es quien toma las decisiones. Hay en el Ministerio de Relaciones Exteriores funcionarios de carrera que podrían, por lo menos evitar los errores y evitar que se note la falta notoria de experiencia, de ambos jugadores. Pero no se les consulta.
1- Bustillo habla antes que el Presidente, plantea que Uruguay puede abandonar en bloque. Desliza cambiar de estatus de miembro (fundador) al de asociado. Menos derechos y el uso del mecanismo de ingreso para salir. Demagogia.
2- El presidente habla. Entorna algunas puertas cerradas por Bustillo. Se oyó: “En los hechos fue una desautorización”, hipótesis deslizada por asesores de Lacalle. El canciller amenaza con 100, Cuquito con 80, le quedan 20 para negociar. Juego de principiante.
3- Lacalle hace saber a la prensa que había dicho al presidente argentino que no iba a tolerar que no se emitieran los discursos, como en Brasilia. De lo contrario él iba a dar a conocer a la prensa el suyo, por sus medios (¿?). Uruguay integra muchos organismos multilaterales (ONU, OEA, FAO, OMC, OIT). Las ponencias de las cumbres son públicas sin necesidad de amenazar a un jefe de Estado. No fue un error, fue mentira.
Lo de Brasilia fue otra cosa. Lula lo llamó “un retiro”. No sesionaba ningún organismo internacional. Era un encuentro para “intercambiar en confianza e informalmente”. Por definición no son públicas. Lo sabe. Si no, debería saberlo o el canciller le debía haber advertido sobre la diferencia entre “multilateralismo” y “mecanismos de consulta”. Hablaba para adentro. No fue solo falta de experiencia. Publicidad.
4- El presidente no habla en lenguaje de cumbre, sino de inauguración de puentes o casillas policiales en el interior. “Todos buenos, pero no aparece el poncho… como dicen en mi pago” (¿?). ¿Será en la Tahona? ¿Dicen eso? Marketing.
5- China… “si podemos ir en banda [sic], vamos”. Si no, China espera y Uruguay espera. Llegado el momento, vamos solos”. Pero si él sabe, los demás saben, todos sabemos (lo anunciamos desde hace tres años, en estas páginas, y lo informamos en su momento) que China ya dijo que no. Mentira deliberada.
Uruguay aceptó esperar al TLC con la Unión Europea para negociar con China. No cumplió su palabra. Bustillo fue a China igual. EL mismo día que estaba allí Lula. ¡Ese día! No cumplió su palabra. Cero boliche diplomático.
China, como si no hubieran sido elocuentes sus señales de posponer durante más de tres años del inicio de las negociaciones, contestó en forma explícita que fuera del Mercosur no le interesa. Dicen que ambos países siguen interesados. Mienten a sabiendas.
Lo que pasa es que cuando hablaban uno y otro, jefe y ejecutor… no pensaban en los interlocutores que tenían enfrente. Pensaban en los destinatarios: la gente en Uruguay. No verían el rostro de Lula, Martínez, Boric… Veían a destinatarios de una selfie con el presidente en algún festival para inaugurar un rotonda en algún lado.
Entre mentiras, medias verdades, publicidad oculta, manipuleo de la información y también falta de experiencia en estos menesteres, el presidente y Bustillo, actuando en tándem, se hicieron un pase, (hacia atrás, como en el rugby). Resultado, el país entero por su culpa hizo un papelón. Y le hicieron pasar al país un papelón.