La madrugada de este jueves el agua penetró en los caminos de entrada y salida de la comunidad, luego que el afluente creció otros 10 centímetros de altura en 24 horas, nivel que califica como desastre según la Dirección de Meteorología e Hidrología.
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Los pobladores de la localidad declararon al diario La Nación que confían en que el muro de contención evitará una catástrofe, pero solicitan a las autoridades asegurar que las carreteras no queden bloqueadas, debido a que los diques colocados al costado de la ruta les falta aún una capa asfáltica y comenzaron a filtrar.
Desde hace varias semanas esta nación está alerta debido a las inundaciones por la crecida del río Paraguay, lo cual provocó una de las peores crisis del país en los últimos 50 años, según fuentes oficiales.
De acuerdo con las estadísticas, el fenómeno, dejó al menos 88 mil damnificados y más de 30 mil desplazados en la capital, quienes pernoctan en plazas y parques ante la poca disponibilidad de albergues.
Autoridades locales advirtieron sobre la posibilidad de que la situación de las inundaciones se extienda hasta el mes de octubre y aseguraron que el Gobierno no cuenta con la capacidad de respuesta si la situación se prolonga o adquiere magnitudes mayores. (Fuente: Prensa Latina)