Maestro Tabárez pensará, otros vendrán que bueno me harán

La verda verdadera que desde los primeros minutos a los celestes los vi más perdidos en la cancha que Adán festejando el día de la madre pero por suerte el botija Betancourt a pesar de llevarse puesto a un contrario que le valió una tarjeta amarilla, se puso el equipo al hombro hasta el final del partido.

Decí que el Cristiano andaba medio apagao y no fue que estaba contenido por los defensores nuestros, que sino nos hubiera clavao algún que otro gol.

Yo no se si fue el armao original del equipo del Tornao Alonso, que como tornado no mueve ni un panadero, pero la apuesta celeste que es el Halcón Valverde, anduvo todo el tiempo dando pasitos de gorrión.

Te decía que Betancourt se puso el equipo al hombro y si no fuera por la cerrada de los caños del golero portugués encajábamos el primer gol y esa ventaja los enfriaba a los cosos.

Para el segundo tiempo y ya con el termo vacío, no por las ventas de café, sino porque me lo tomé yo solo como para ahogarme en cafeína, el Tornao se iluminó e hizo entrar entre otros al Georyian Arrascaeta y ahí es como que Uruguay encontró por donde iba la cosa, pero ya era tarde.

Para colmo, otra vez un palo se convirtió en el enemigo número uno para al menos hacer el gol de la honra, y los portugueses nos clavaron dos goles.

Ya antes del segundo gol, el guasap no paraba de sonar con gente que me mandaba fotos del Maestro y los comentarios de los periodistas deportivos que habían empezado a dinamitar con criticas, el monumento que hace poco tiempo atrás habían erigido del tornao Alonso.

Tal vez los malos resultados de la celeste en el Mundial no tengan tanto que ver con el Alonso en si mismo.

Después de todo no dejamos de representar a un país donde el Presidente recibe como regalo de un jeque árabe pescao podrido que lo manda en maleta y por avión, y el ex jefe de la seguridad presidencial es como el director de los Asaltantes con Patentes o La Escuelita del Crimen.

Yo no creo que Alonso deseche del todo la experiencia de su antecesor, lo que pasa que quiere ir mas rápido por la recompensa que recorrer el camino, y uno al hombre lo puede entender.

No cualquiera llega a un país como Qatar y se convierte de un día para otro en ojeto de deseo de las japonesas, ¡las japonesas!.

Pero hay destinos que están marcaos; finalmente al Maestro se le cumplió aquello de que otros vendrán que bueno me harán.

Ilustración: Jorge Fuentes