Vendiendo los últimos fecas en la concentración de la Celeste, escuché algunas de las recomendaciones que el tornado Alonso le dio a los jugadores y que luego dijera en la conferencia de prensa.
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Yo le había dado a los chochumas mis propios consejos luego del empate con los coreanos.
A mi modo de pensar, los once deberían integrarse luego de disputarse un partido entre solteros contra casados como hacemos en el rioba, y mejor aún, veteranos contra juveniles.
El problema fue que en ésta segunda opción, ningún botija quería jugar con los veteranos, y a los que les tocaba jugar contra los veteranos, después de una selección producto de la democrática pisadita, les nacía una cosa de respeto que los dejaba paralizados.
¿Qué imberbe se va a animar a gritarle al Lucho Suárez: “no corres ni el bondi” o pedirle al Faraón Godin un tanque de oxígeno?; no da muchachos no da.
Al Tornado le propuse feca mediante y siempre con el analis del primer partido, porque contra Portugal no jugábamos como en el básquet marcando la zona, cosa de no seguirla pasando para atrás de la raya del medio.
Y que de última, si masomeno venimos bien, que el Lucho, Cavani , Godín y hasta el propio Muslera, meterlos en los últimos diez minutos del partido, cosa de generarles miedo y sorpresa a los cosos.
Luego de oída la conferencia del Alonso hubo una frase que me dejó maquinando y es esa de: “Siempre decimos que en el juego las ventanas se abren y se cierran todo el tiempo. Si uno va lento a veces se cierran, pero si uno va rápido las puede encontrar abiertas”.
Con los coreanos te digo que las ventanas las encontramos hasta con la cortina baja, pero con los portugueses quién te diga; si perdieron una colonia como fue Brasil porque no les vamos a meter algún pelotazo pa adentro de la casa y por la ventanita del baño.
Me resultó un tipo con los cosos bien puestos cuando dijo que : "No hay jugadores intocables".
Esa se la banco a morir, porque el único intocable que conocí fue el Elio Nets y nosotros lo mas parecido que tenemos es el “pistolero”.
Y me encanta la humildad del tipo cuando les espeta en la conferencia: “Me pude haber equivocado en algún armado, pero siempre poniendo el que creía que era el mejor 11”, o sea, puso uno de los mejores punteros, ahora habrá que ver cuáles son los mejores del uno al once.
¡Uruguay nomá!
El cafetero de la tribuna